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Nichos construídos en el nuevo cementerio de Granadilla |
Granadilla, el antiguo
señorío de Granada, fundada por los árabes en el siglo IX como baluarte
estratégico de la zona, situado en una colina de pizarra que domina un extenso
terreno, paso obligado por la Vía de la Plata hacia la antigua ciudad romana de
Cáparra, fue capital del señorío conocido como Comunidad de Villa y Tierras de
Granadilla, además de cabeza de partido judicial y eclesiástico.
Por Decreto 1347/1965, de 3 de mayo, del Ministerio de la
Gobernación (BOE de 29 de mayo de 1965), firmado por Franco y el ministro de la
Gobernación, Camilo Alonso Vega, se acuerda la disolución del municipio e
incorporación de su término municipal a los limítrofes, “debido a haber quedado
el término municipal de Granadilla (Cáceres) sin población y riqueza imponible
suficientes con motivo de la construcción de la presa “Gabriel y Galán”. A esta
propuesta prestó su conformidad la Corporación municipal de Granadilla, y con
respecto a asignar el territorio de su término, los informes de las Autoridades
provinciales emitidos en el expediente han considerado que la solución más
oportuna es incorporar dicho término al Municipio de Zarza de Granadilla,
excepto los terrenos de la margen derecha del río Alagón, que pasarán a formar
parte del Municipio de Mohedas de Granadilla.
Desalojada
la población desde años anteriores a la disolución del municipio y con los
últimos habitantes que se marcharon tras aquella, la villa queda en un estado
de abandono hasta 1980, en que es declarada conjunto histórico-artístico y en
1984 es elegida para su inclusión en el Programa de Recuperación de Pueblos
Abandonados, junto a Umbralejo (Ciudad Real) y Búbal (Huesca). A partir de ahí
comienza la reconstrucción: el castillo, la muralla y la iglesia (único
inmueble no expropiado por petición de la Iglesia), que puso en valor la
Diputación Provincial.
Cada
año, los naturales de Granadilla vuelven a la villa perdida para rezar por sus
difuntos el día 1 de noviembre, Día de Todos los Santos y víspera del Día, y el
15 de agosto por la festividad de su patrona, Nuestra Señora de la Asunción.
De
cuando en cuando, periodistas y escritores se afanan en escribir sobre la
belleza de este pueblo perdido y descubierto por excursionistas de fin de
semana y de vacaciones.
Granadilla
fue la España vaciada a la fuerza, desterrada a su pesar. En la última década poblada (1955-1965), sus
habitantes se esparcieron por ciudades y pueblos de España en busca de su otra
vida. El Instituto Nacional de Colonización Agraria ofreció a los agricultores
el nuevo poblado surgido por el regadío: Alagón del Caudillo (hoy, Alagón del
Río), entonces en casas prefabricadas y sin urbanización. Muchos emprenderían después
una segunda emigración al País Vasco, Cataluña y Pamplona.
El
pueblo quedó en península: la carretera Hervás-Valverde del Fresno, cortada por
las aguas del embalse y hacia Zarza de Granadilla por la hondonada del arroyo
Aldobara, sin el puente que nunca se construyere. La Confederación hubo de
construir una carretera por la península de entrada a la localidad. Gracias al
Plan E del presidente Zapatero, fue arreglada y los primeros cuatro kilómetros,
a la salida de Zarza hacia la villa, tuvo que arreglarlos la Diputación cuando supo
que eran suyos, tras una visita de la anterior presidenta, Rosario Cordero (q.
e. p. d.).
Recientemente, en un artículo publicado en la revista National
Geographic [1]
se dice textualmente, por boca del presidente de la Asociación Hijos de
Granadilla, que “lo único que han conseguido durante estos veinte años desde su
fundación es que se construyan unos nichos en el nuevo cementerio que la
Confederación hizo a las afueras del pueblo, destinado a aquellos hijos de
Granadilla que quieran volver”, donde él quisiere descansar. No es la primera
vez que se apropia de esta mentira, que ya dijere hace algunos años su esposa
en Canal Extremadura TV: que su asociación había logrado, por fin, uno de sus
sueños: construir nichos en el nuevo cementerio para quienes deseen descansar
en él hasta el Día del Juicio Final. Ni el antiguo, que pereció bajo las aguas,
con el afloramiento de restos anatómicos, ni el nuevo, construido por la
Confederación en 1961, cedido por Hacienda al Ayuntamiento de Zarza de
Granadilla. Nada es nuestro ya, salvo la iglesia, donde él daba sus mítines
antes o después de las misas.
Mentira:
el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas acordó por Orden de 1 de abril
de 2014 la cesión gratuita del citado inmueble al Ayuntamiento de Zarza de
Granadilla con destino a cementerio municipal. La firma del documento
administrativo de cesión gratuita se formalizó el 25 de abril de 2014 por parte
de la delegada de Economía y Hacienda de la provincia, María Luisa Martínez, en
representación de la Administración general del Estado, y por Germán García
Benito, alcalde-presidente del Ayuntamiento de Zarza de Granadilla, natural de Granadilla, que promovió la desafectación y construcción de los nichos. El
documento fue inscrito en el Registro de la Propiedad de Hervás el 14 de julio
de 2014. El Ayuntamiento de Zarza de Granadilla, una vez en propiedad de la
finca, procedió a sacar a licitación, por el sistema de contratación, la
construcción de 27 nichos en el nuevo cementerio, los primeros construidos en
el recinto, de los cuales se ocuparon tres en agosto de 2014, de vecinos
fallecidos oriundos de la antigua villa. [2]
El
presidente de la Asociación pretendió hacer socio de la misma a aquel alcalde
de Zarza nacido en la villa: le pidió las mil pesetas de cuota anual y luego,
25.000 pesetas con carácter retroactivo desde que se fundó la asociación, algo
inconstitucional que el malogrado alcalde fallecido tiempo después, rechazó de plano.
El
presidente de la Asociación miente más que predica: ha intentado engañar al
pueblo (que se lo iban a devolver…, cómo y para qué si fue expropiado y pagado
tarde y mal); engaña a los obispos de Coria-Cáceres, a las autoridades (“porque
soy un referente de Granadilla”), a los medios informativos, especialmente de
TV, que acuden a la villa todos los 1 de noviembre y 15 de agosto, porque no se
informan. Lo que él diga. ¿Y quién es él, qué ha conseguido; por qué no da
cuenta de los socios que tiene y qué hace con sus dineros?: solo los nichos, y
es mentira, propalada por Canal Extremadura TV hace unos años.
Y,
por último, la mentira más extendida de todas: “Su nombre original fue Granada,
aunque, tras la conquista de Granada en 1492 por parte de los Reyes Católicos,
pasó a denominarse Granadilla para evitar confusiones.” Otra mentira mayor que
escriben muchos copiando de otros. “En 1833, Javier de Burgos [3] procedió a materializar la
División del Territorio Español, estructurando el país en provincias y municipios.
En 1834 creó las Diputaciones Provinciales y los Partidos Judiciales,
definiendo sus cabeceras. Fue entonces, y no antes, cuando al convertirse la
villa en cabecera del Partido Judicial, la Granada histórica pasó a denominarse
Granadilla” [4],
denominación que convivió en los libros de actas municipales hasta mediados del
XIX: “en la villa de Granada”, “en la villa de Granadilla…”
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[1] Vid.: Debat,
Laureano: De pueblo fantasma a
imprescindible de Cáceres, en Viajes, de National Geographic, de 28/10/2023.
[2]
Vid.: Documentos Administrativos de cesión de la
propiedad y de inscripción en el Registro de la Propiedad de Hervás en el
Archivo Municipal de Zarza de Granadilla (AMZG), así como la Ordenanza que rige
el Cementerio de esta población, aplicable al de Granadilla, según información
del alcalde, Germán García Benito. Véase también el programa de Canal
Extremadura TV "52 minutos", dirigido por Isidoro Campos y coordinado
por Mónica Pascual, y emitido el 31 de octubre de 2014, en el que se informa
del traslado de los restos del antiguo cementerio al nuevo, la construcción de
los 27 nichos y el proyecto del nuevo cementerio redactado por la Confederación
Hidrográfica del Tajo en 1961.
[3] Vid.: Javier
de Burgos, ministro de Fomento desde
octubre de 1833, puso en marcha las reformas administrativas aprobadas por la
reina María Cristina el 30 de noviembre del mismo año.
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