jueves, 30 de noviembre de 2023

RAFAEL ESBRY SÁNCHEZ, HIJO ADOPTIVO DE PLASENCIA Y JERTE



Rafael Esbry Sánchez (Badajoz, 1871; Madrid, 1934) fue un militar y periodista, director de La Correspondencia Militar y de El Ejército Español y colaborador de El Bloque, El Distrito, El Iris, El Liberal Extremeño y La Opinión.  Político liberal canalejista, diputado a Cortes en varias ocasiones por el distrito de Plasencia, e hijo adoptivo de esta ciudad y de Jerte.

    Fue elegido diputado a Cortes en las elecciones celebradas el 8 de mayo de 1910 en Cáceres, distrito de Plasencia (legislatura 10/09/1910 al 02/01/1914), en la que sustituye a Luis de Armiñán y Pérez. En las elecciones a Cortes de 1914 perdió su escaño en lucha con el candidato del partido conservador, que había recuperado el poder. Elegido de nuevo diputado en las elecciones, convocadas por un nuevo gobierno liberal, el 9 de abril de 1916, aunque el 22 de mayo se aprueba el informe del Tribunal Supremo proponiendo la nulidad de la elección y necesidad de una nueva convocatoria. Volvió a conseguir acta de diputado por el distrito de Plasencia, cargo que desempeñaría hasta 1918. Su actividad político-administrativa le llevó a Puerto Rico, donde desempeñó diversos cometidos en nombre del Gobierno español. Su amistad con Canalejas, jefe del gobierno liberal, y sus relaciones e influencias en Madrid, le permitieron obtener importantes mejoras para la comarca placentina, por lo que fue nombrado hijo adoptivo de Plasencia en 1912 y de Jerte en 1913.

    Como periodista, colaboró en El Liberal Extremeño, semanario al servicio de su política, que se publicó en su primera etapa entre 1915 y 1919. En 1920 pasó a una segunda etapa, cuando Rosado Munilla traspasó la imprenta de su propiedad a su amigo y compañero en las lides periodísticas Mariano San José. La enfermedad de este, su segundo director, llevó al periódico a varias suspensiones y también fue censurado en varias ocasiones por el Gobierno Civil. Inició su andadura el 19/06/1915 y cesó en junio de 1919. De periodicidad semanal y difusión comarcal, había editado 142 números hasta marzo de 1918. En su segunda etapa (1920-1928) no figuraba como colaborador.

    El Ayuntamiento de Plasencia le nombró hijo adoptivo en la sesión ordinaria de 22/08/1912, siendo alcalde Manuel León. Según el acta de la sesión, “siendo evidentes y notorias las gestiones eficacísimas realizadas por el diputado a Cortes por este distrito D. Rafael Esbry para conseguir la pronta aprobación del expediente de abastecimiento de aguas, proponía constara en acta el agradecimiento de la corporación”.

    Sigue diciendo el acta que “el señor San José, apoyando la anterior manifestación, la amplió en el sentido de que debería acordarse declarar al Sr. Esbry hijo adoptivo de la ciudad, pues era de todos conocido el interés que demostraba en todos los asuntos. Todos los señores concejales estimaron muy acertados y justificadas las proposiciones hechas y entendieron que era merecedor por todos los conceptos el digno diputado de que se le otorgara tal honor, ya que siempre ha puesto todo su valor e influencia al servicio de los intereses del distrito y de esta población en particular y en su consecuencia acordó el ayuntamiento por unanimidad declarar al expresado D. Rafael Esbry Sánchez hijo adoptivo de esta ciudad, comunicándole este acuerdo.” En la sesión celebrada el 29 de agosto de 1912 se acordó que constara en acta el agradecimiento del interesado.

    Rafael Esbry era hombre de sangre caliente defendiendo sus convicciones y, en unión de su hermano Pedro, por diferencias de opinión entre periódicos, agredieron con una llave inglesa dentada al director de La Correspondencia Militar en la calle Jorge Juan de Madrid, de la que resultó herido grave don Diego Fernández Arias y Esbry fue conducido a la prisión por un alguacil del juzgado.

    “En 1907, cuando el periodismo de empresa no había desplazado a la vieja prensa, los periodistas seguían desafiándose simplemente para defender a su señor, según apuntaba Leopoldo Romeo. Coincidiendo, por otra parte, dos actividades de las citadas en la misma persona, esto es, la militar y periodista, no es difícil hallarnos ante consumados esgrimidores. Es también muy amplia la lista de militares-periodistas que empuñan las armas de acuerdo con las normas establecidas en los códigos de honor: Leopoldo Bejarano (muchos años redactor de El Liberal), Diego Fernández Arias (a la sazón director de La Correspondencia Militar), Clodoaldo Piñar (Ejército y Armada) y Rafael Esbry (El Ejército Español) se encuentran entre ellos. Curiosamente, Fernández Arias y Esbry llegaron a sostener, en junio de 1903, una lucha libre de formulismos (como pelea lo califican Seoane y Saiz), en la que el primero resultaría herido de gravedad”, según Juan Carlos Mateos Fernández.

    En otra ocasión, fue condenado por la Audiencia de Madrid a una pena de seis meses y un día de prisión correccional. Es indultado por el Rey, conmutándole la pena por otra de igual tiempo de destierro.

    Años más tarde, Rafael Esbry fue sorprendido por las autoridades, en el barrio de Doña Carlota, batiéndose en duelo a espada con el entonces capitán de caballería Queipo de Llano, futuro general en jefe de las fuerzas nacionales en Andalucía durante la Guerra Civil Española, por lo que este último pasó dos meses en la prisión militar del castillo de Santa Catalina (Cádiz) y le supuso la pérdida de destino.

    Durante el entierro del presidente del Consejo de Ministros, señor Canalejas, asesinado siendo presidente, su amigo, Rafael Esbry, diputado por Plasencia, fue uno de los ocho que sacó a hombros su féretro desde la capilla ardiente hasta el armón de artillería.

    Falleció en Madrid el 27 de diciembre de 1934.

------------------------------------------------------------

Bibliografía consultada: Archivo Histórico Municipal de Plasencia; Sánchez González Juan, en la Gran Enciclopedia Extremeña, Tomo IV, pág. 196; www.congreso.es; Mateos Fernández, Juan: Cuestión de honor: los periodistas se baten en duelo, en Historia y Comunicación Social 1988, núm. 3, págs.. 323-341; https://sepuex.unex.es/publicacion/el-liberal-extremeno-593

https://sepuex.unex.es/personas/0-nombre-ASC--1,2-2351-esbry-sanchez-rafael; La Correspondencia de España, de 11/06/1910; La Publicidad, de 05/05/1905; El Heraldo Militar, de 25/02/1910; Valenzuela De las Heras, Susana, en Magnicidio, entierro y funerales del Excmo. Sr. D. José Canalejas y Méndez, presidente del Consejo de Ministros y expresidente del Congreso de los Diputados, pág. 247; Lodo de Mayoralgo y Lodo, en Movimiento nobiliario 1931-1940. Año 1934, pág. 175; y La Opinión, órgano bisemanal del partido Plasencia-Jarandilla, de 03/03/1914, año I, núm. 1.


martes, 28 de noviembre de 2023

FERNANDO DE LOS RÍOS, EL MINISTRO QUE IMPULSÓ EL REESTRENO DEL TEATRO ROMANO, HIJO ADOPTIVO DE MÉRIDA


Fernando de los Ríos Urruti (Ronda, Málaga, 08/12/1879; Nueva York, 31/05/1949) ha pasado a la historia de España por ser ministro de Justicia (14/04/1931-16/12/1931); ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes (16/12/1931-12/06/1933) y ministro de Estado (12/06-12/09/1933) y diputado en Cortes por Granada en 1919-1920 y del 07/05/1931 al 02/02/1939; y por Madrid (28/05-15/09 de 1923) y diputado de la Asamblea Nacional Consultiva en 1927.

A la historia de Extremadura ha pasado por ser hijo adoptivo de Mérida el 19 de junio de 1933 cuando, siendo ministro de Instrucción Pública, acogió bajo su patrocinio la idea del Festival de Teatro Clásico Romano de Mérida en su segunda era y concedió ayuda económica del Estado para la representación de “Medea”. Sus dos ilustres actores, Margarita Xirgu y Enrique Borrás, así como él mismo, fueran nombrados hijos adoptivos de Mérida por el Pleno del Ayuntamiento presidido por el alcalde, Andrés Nieto Carmona. Además, el 29 de junio de 1933 inauguró el Parador Nacional de Turismo de Mérida.

El profesor De los Ríos Urruti era hijo de José del Río y Fernanda Urruti y sobrino de Giner de los Ríos, fundador de la Institución Libre de Enseñanza; se casó con Gloria Giner de los Ríos García y tuvo una hija, Laura de los Ríos. A los 16 años se trasladó a Madrid, donde se formó en el espíritu de la Institución Libre de Enseñanza.

Viajó a Alemania, donde amplió sus estudios, becado por la Junta de Ampliación de Estudios.  A partir de 1911, ejerció la docencia como catedrático de Derecho Político de la Universidad de Granada.

Tras la huelga revolucionaria de 1917, ingresó en el PSOE, siendo elegido diputado socialista en 1919 y reelegido en 1923, 1931, 1933 y 1939. En 1930 participó en el Pacto de San Sebastián, que desembocó en la fracasada sublevación de Jaca, que pretendía la proclamación de la II República Española, lo que supuso, conforme a la legislación vigente, su encarcelamiento. Algún tiempo después, en 1928, fue elegido vocal de la Comisión Ejecutiva del PSOE, siendo reelegido en 1932. Ejerció como ministro de Justicia en el gobierno provisional de la II República y, más tarde, de Instrucción Pública.

Falleció en Nueva York (Estados Unidos) el 31 de mayo de 1949, de cuya Universidad de Columbia fue profesor.

Entre sus obras principales destacan: Obras completas, edición a cargo de T. Rodríguez de Lecea, Rubí (Barcelona) y Madrid (Anthropos y Fundación Caja Madrid, 1997, cinco volúmenes; La filosofía del Derecho en Francisco Giner y su relación con el pensamiento contemporáneo (Madrid, Biblioteca Corona, 1916); Vida e instituciones del pueblo de Andorra. Una supervivencia señorial (Madrid, Centro de Estudios Históricos. Junta para la Ampliación de Estudios e Investigaciones Científicas, 1920); Mi viaje a la Rusia soviética (Madrid, Caro Raggio, 1921); El sentido humanista del socialismo (Madrid, Javier Morata, 1916); Religión y Estado en la España del siglo XVI (New York, Instituto de las Españas en los Estados Unidos, 1927); y El pensamiento vivo de Francisco Giner de los Ríos (Buenos Aires, Losada, 1949).

El 19 de junio de 1933, el Ayuntamiento de Mérida celebró la sesión supletoria de la ordinaria, señalada para el día 17, que no pudo celebrar por falta de quórum (“de número”, según el acta). En aquella sesión se acordó nombrar hijos adoptivos de Mérida “al Excmo. Sr. D. Fernando de los Ríos, actual ministro de Estado, que siéndolo de Instrucción Pública, acogió bajo su patrocinio la idea de este festival artístico y concedió ayuda económica del Estado para que la representación de ʻMedeaʼ pudiera ser un hecho; y de los ilustres actores doña Margarita Xirgu y don Enrique Borrás, que tan magistralmente han interpretado los principales personajes de la clásica tragedia, teniendo pendientes de su arte inimitable a los miles de espectadores de dentro y de fuera de Mérida, muchos extranjeros, que acudieron a presenciarla. Estos nombramientos se extenderán en artísticos pergaminos, de los que oportunamente se hará entrega a los interesados.”

Asimismo, el Pleno “acordó felicitar por la participación que cada uno ha tenido y por la aportación que con su trabajo han hecho para que pudiera celebrarse el inolvidable espectáculo a los señores siguientes:

“Don Miguel de Unamuno, sabio maestro traductor de esta obra; don Cipriano Rivas Cherif, inteligentísimo director artístico de la Compañía Xirgu-Borrás; Excmo. Sr. Don José Ramón Mélida, insigne arqueólogo, director de las excavaciones, que con su trabajo tenaz y perseverante, durante muchos años han hecho surgir de sus ruinas el Teatro Romano, posibilitando que en él se diera la representación, y al Ilmo Sr. D. Maximiliano Macías Liáñez, delegado provincial de Bellas Artes, hijo ilustre de esta ciudad, sin cuya eficaz ayuda bajo la dirección del señor Mélida no hubiera sido posible la reconstrucción del teatro. Ofreciéndose a todos estos señores, así como a los declarados hijos adoptivos, como recuerdo de la fecha histórica de la representación de ʻMedeaʼ, copias de las fotografías sacadas durante el acto.

Todos los señores concejales se adhirieron a estas propuestas, que sin discusión y por unanimidad son aprobadas.”

Por último, la presidencia da cuenta de que con motivo de la representación de "Medea", el embajador de Italia hizo entrega de una rama de laurel del Capitolio, que el pueblo de Roma ofrenda al de Mérida, “en conmemoración de la fecha en que ha dado comienzo este ciclo histórico-artístico, que tan alto ha de poner en el mundo el nombre de nuestra ciudad”.

 --------------------------------------------------

Bibliografía consultada: Archivo Histórico Municipal de Mérida, libro de actas municipales de 1933; Tesis doctoral: La filosofía política en Platón (Fundación Fernando de los Ríos, biografías); Octavio Ruiz-Manjón, en Diccionario Biográfico Español de la Real Academia de la Historia. Fernando de los Ríos y Urruti; Víctor Moreno, María E. Ramírez, Cristian de la Oliva, Estrella Moreno y otros: Biografía de Fernando de los Ríos (website: buscabiografías.com); Diccionario biográfico del socialismo español, Fundación Pablo Iglesias, DBSE, 1879-1939, núm. 1672; y Wikipedia.


sábado, 25 de noviembre de 2023

ENTREVISTA CON ROSA LENCERO, AUTORA TEATRAL Y POETISA


Rosa María Lencero (La Nava de Santiago, Badajoz, 1960), licenciada en Geografía e Historia, es escritora de poesía, narrativa, cuento infantil, teatro y guionista de teatro, cine y televisión. De 2012 a 2015 fue directora de la Editora Regional de Extremadura. Entre sus obras destacan: ʺEl galo moribundoʺ, ʺComo amantes de Etruriaʺ, ʺMar de Yerbaʺ, ʺEl libro de los desposoriosʺ, ʺMemoria de tu nombreʺ y ʺEl agua de tus sueñosʺ (poesía); ʺLa paz del loboʺ (narrativa); ʺEncantadas de la vidaʺ (relato); ʺNosotras, mujeresʺ y ʺAmargasʺ (teatro) y dos cuentos ilustrados.

El 3 de marzo de 2006 estrenaba en Mérida ʺNosotras, mujeresʺ, con el hilo argumental del papel de la mujer a través de la historia, su debut teatral, promovido por las asociaciones de mujeres de Mérida para conmemorar el Día Internacional de la Mujer. El Teatro Carolina Coronado de Almendralejo acoge esta noche, a las 20:30, la reposición de esa obra, que estará cargo de ʺLa Farándula del Vientoʺ, recuperada por el Ayuntamiento de Valencia del Ventoso como un proyecto de igualdad. En el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, habla en esta entrevista sobre el papel de la mujer en la historia, la plena igualdad, las lacras de género y el bienestar igualitario en plenitud.

Pregunta:--¿Qué le llevó a escribir esta obra, estrenada en 2006 en el Centro Cultural Alcazaba de Mérida?

Respuesta:---Fue Asunción Mieres, entonces directora del Aula de Teatro de la Universidad de Extremadura, la que me animó a escribir teatro. Necesitaba una obra coral para su grupo y aproveché para introducir el tema de la mujer de una manera divertida y desenfadada, con ternura e ironía.

                           La mujer en la historia

    P.--El hilo argumental es el papel de la mujer a través de la historia; el mundo grecorromano, la Edad Media, el Siglo de la Razón (el XVIII), el siglo XXI y hasta el XXII. ¿Cómo ha cambiado el papel de la mujer a través de esta historia que relata en “Nosotras, mujeres”?

    R:---La realidad ha mejorado en los tiempos actuales a costa de un durísimo esfuerzo, pero no en la plena igualdad. Aún se siguen reivindicando los derechos que no se tienen, hay demasiadas barreras que hacen a la mujer persona de otra categoría desnivelada.

    P:-- A pesar de los cambios históricos y sociológicos, sostiene en su obra que la mujer no se ha librado de las servidumbres de su sexo… Subsisten la precariedad laboral y los contratos basura que definen su situación en este siglo…, la falta de conciliación de la mujer trabajadora… ¿Es este el mensaje que ofrece de la mujer en el siglo XXI?

    R:--No hay otro mensaje más certero: las mentalidades, las actitudes y los roles necesitan de otras generaciones más avanzadas que las que aún poblamos este siglo XXI, en el que subsisten las lacras de género que cuelgan de los hombros de las mujeres: trabajo, familia, relaciones sociales, educación...

Vesta y Cupido con Pepa, mujer contemporánea

    P:-- La incorporación de la mujer al mundo del trabajo fuera de casa, desde el siglo XX, ¿no ha contribuido a mejorar su situación respecto a épocas anteriores?

 R--Sigue habiendo diferencias salariales incluso de mujeres comparativamente más preparadas. Su carga laboral con la doméstica sigue pesando... Incorporarse al trabajo más activamente fuera de las paredes del hogar es una liberación personal, una superación; pero la mujer siempre ha trabajado fuera del hogar en unas condiciones pésimas, por pura supervivencia familiar.

           La mujer del siglo XXII

    P:--La obra se adentra también en la mujer del siglo XXII, con Selenia, que ha superado la servidumbre del parto, a la que se le asignan hijos siempre que lo solicite, y su relación con los hombres sin sexo fijo, sino por estímulos placenteros… ¿Ve usted así a la mujer del próximo siglo?

    R:--Sería una visionaria. Vería un capítulo de ciencia ficción con los ojos de 2023. La esperanza de los seres humanos debería ser el bienestar igualitario en plenitud. Selenia ya está llegando, pero aún le queda camino.

    P:--¿Considera que la sociedad ha pasado la era patriarcal y nos encaminamos hacia otra matriarcal, en la que la mujer marca e impone ahora las relaciones humanas con su pareja?

   R:--Patriarcado, matriarcado, son otra vez casillas dentro de un laberinto. Las mujeres están afianzando su empoderamiento. Lo necesita la economía fuera de los estereotipos tan marcados. Una discriminación no debe generar otra. 

    P:--¿Cree que nos encaminamos hacia una sociedad en la que se invierten los roles tradicionales de la pareja humana con respecto al pasado?

    R:---El pasado se ha superado con la educación: otros tiempos, otra mentalidad. La cultura y la formación nos alejan de las conductas tradicionales de ambos roles. Los de comportamiento masculino o femenino se están difuminando porque la sociedad ha generado otros comportamientos y necesidades. 

    P:-- ¿Qué papel ha jugado el feminismo bien entendido en la liberación de la mujer en este último siglo?

    R:--Esencial. Se reclama lo que te pertenece, tu posición como ser humano. Hay un oleaje de feminismos según posturas ideológicas, religiosas, culturales... Cada uno, según sus premisas, busca la igualdad, erradicar la discriminación y la violencia. No es cuestión de despojar de liderazgos a los hombres, de ponderar ninguna superioridad; es equidad. La vida como un recurso, y vida tenemos todas y todos. Y según Marie Curie, "nadie puede construir un mundo mejor sin mejorar las personas".


miércoles, 22 de noviembre de 2023

JACINTO GARCÍA-MONGE, HISTORIA DE UN MAGISTRADO EXTREMEÑO


Jacinto García-Monge y Martín (Pozuelo de Zarzón, Cáceres, 20/09/1898; Madrid, 16/03/1982) fue un juez extremeño que llegó a magistrado del Tribunal Supremo, nacido en las turbulencias de la derrota del año de su nacimiento, en que España perdió sus últimas tierras en el continente americano, además de Filipinas, que tanto influyó en una generación de escritores y poetas.

    Su padre, Jacinto García-Monge Moreno, fue farmacéutico y químico, natural de Garrovillas, que ejerció en Pozuelo de Zarzón tras contraer matrimonio con Magdalena Martín Delgado, natural de la localidad. Tuvieron tres hijos: Antonio, que ejercería cono médico; Federico, que falleció a edad temprana, y Jacinto, el protagonista de la historia. El padre falleció poco antes de su nacimiento, por lo que su madre se hizo cargo de la farmacia junto a sucesivos regentes.

    El historiador y cronista oficial de Trujillo, José Antonio Ramos Rubio, académico correspondiente de la Real Academia de Extremadura de las Letras y las Artes y de la Historia, recrea en una nueva obra [1], junto a la ayuda de sus hijos, la peripecia vital de su padre, que dejó escrito su Diario, así como sus poemas, en los que fue volcando sus recuerdos en los que dejó entrever su sensibilidad, su amor y nostalgia por su familia y su tierra, además de su sentido de la Justicia, que aplicó al dictado de su conciencia, con humanidad, honestidad y sensibilidad.

    Cursa sus estudios primarios en la única escuela del pueblo y comienza a escribir poemas desde muy temprana edad. En 1910 Jacinto se marcha a estudiar a Cáceres y más tarde se traslada a Plasencia, donde cursó dos años, que convirtió en tres cursos. Los dos últimos cursos de Bachiller los hizo en Cáceres, donde vivió en el Palacio de La Isla. Después se marchó a Salamanca, en cuya universidad comenzó Derecho, donde realizó las asignaturas del Preparatorio y del primer curso. Decide continuar Derecho en Madrid, donde se licencia a los 21 años.

    Vuelve a Cáceres a prepararse las oposiciones de Notaría para ejercer en el despacho de su tío, Juan Moreno, fiscal de la Audiencia. Mientras tanto se presenta y gana las oposiciones a Judicatura, que aprueba sin plaza, situación que el Ministerio de Justicia palía ofreciéndole con carácter interino la de registrador de la Propiedad de Valladolid. Posteriormente ejercería en Burgo de Osma. Allí conoce a María Dolores Redondo, natural de la localidad, que convierte en su compañera de su vida y madre de sus hijos. Aprueba la oposición a Judicatura y se casa con Lola, como la conocían familiarmente, en la catedral de Valladolid. No pudo realizar la luna de miel a Italia, porque es trasladado al juzgado de Barco de Ávila, elegido por Jacinto por proximidad a su tierra. Era el año 1926. Allí pasa un año escaso, inicia su vida matrimonial y nace su primer hijo, Federico. Es trasladado al juzgado de Almazán, en Soria, donde el matrimonio tiene una hija a los seis meses de gestación. Magdalena no sale adelante, provocando en sus padres el primer latigazo de la vida. Poco después nacería José Antonio. La familia García-Monge se traslada posteriormente a Calatayud. La Guerra Civil le sorprende cuando se encontraba veraneando en Santander. En el sanatorio de Valdecilla nace su nueva hija, María Teresa.

    Tras la guerra, vuelve a Aranda de Duero y después se incorpora a Calatayud y, por añadidura, despacha el juzgado de Ateca. Un día recibe un telegrama comunicándole que se le militariza como capitán honorífico jurídico militar, se presenta al auditor, quien le designa juez militar de la plaza. Más tarde solicita ser juez militar en lugar de miembro del Consejo de Guerra. Es trasladado a Alicante con otros jurídicos y, tras curarse de un proceso gripal, le destinan a Castellón, donde le sorprende el final de la guerra. Allí nace su hijo Luis Jacinto el 14 de junio de 1940.

    Luis Jacinto seguía militarizado. Solicita al auditor volver cuanto antes a su función jurídica, quien le pide que le busque a un oficial jurídico militar, que halla en un registrador de la Propiedad militarizado, que acepta.  Pasados unos años, le llega la notificación de su traslado al Juzgado de Burgos. Pasa las mañanas en el juzgado y por las tardes, tras resolver los pleitos, lo dedica a sus aficiones: poesía, literatura, música, arte… La mayor parte de sus poemas los incluye en su obra “Evocación”, en el que plasma la nostalgia por su tierra extremeña. En el libro “Poetas extremeños del siglo XX”, del conde de Canilleros, aparecen dos poemas suyos.

    Tiempo después era nombrado magistrado de la Audiencia Provincial donde, tras una corta estancia, al dividirse esta en dos secciones, es designado presidente de la segunda. Tras nueve años en Burgos, es trasladado a Zaragoza. El 3 de octubre de 1952, Jacinto García-Monge es nombrado presidente de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Zaragoza. Después es designado juez del número veinte de Madrid, donde “alguien más arriba que me conocía y estimaba”, le sorprende un día al verse condecorado con la Cruz Distinguida de Primera Clase de San Raimundo de Peñafort, en enero de 1965. No pasó mucho tiempo en ser nombrado miembro de la Sala Primera de lo Civil de la Audiencia. Llevaba poco más de un año en la Audiencia cuando su nombre aparece en una terna que se había formado para una plaza en el Supremo. Avalado por sus relevantes méritos, fue designado magistrado de la Sala Primera de lo Civil del Tribunal Supremo el 14 de noviembre de 1963, donde pasó los diez últimos años de su vida, demostrando su rectitud al emitir el juicio.

    Sus tres hijos varones se inclinaron por la carrera de Derecho y su hija, por la de Farmacia, como su abuelo. Jacinto García-Monge, el padre, magistrado del Supremo, juez impecable, falleció el 16 de marzo de 1982, a los 82 años, y fue enterrado en su pueblo natal, Pozuelo de Zarzón, cumpliéndose así su voluntad.

----------------------------------------

[1] Vid.: Ramos Rubio, José Antonio:  Entre luces y sombras. Historia de un magistrado extremeño, TAU Editores, Cáceres, 2023, 119 págs.  Prólogo de José Luis Pérez Mena, jurista y escritor.


jueves, 16 de noviembre de 2023

MAREA ROSA EN LAS CALLES


Ciudades y pueblos de la región se unieron el mes pasado en la Marcha Rosa, que llenaba a mediados de octubre las calles de ciudades y pueblos de la región. La Marcha Rosa o Carrera de la Mujer, como es conocida, tiene como finalidad concienciar a la sociedad sobre el cáncer, crear hábitos de vida saludable y promover la actividad física entre la población, con especial hincapié entre las mujeres.

Este acontecimiento deportivo, iniciado en 2018, se creó para fomentar la práctica deportiva entre las mujeres, crear hábitos de vida saludable y concienciar acerca del cáncer de mama a la población. El senderismo, o Marcha Rosa, y la Carrera de la Mujer, han calado en una sociedad que sufre en su propia casa, junto a ellas, un cáncer que ataca cada día el alma de las familias. Nadie está libre de él y porque es cosas de todos, no solo de ellas, los hombres también se enfundan la camiseta rosa para llamar la atención sobre una enfermedad que puede ser mortal, pero que, advertida a tiempo, puede superarse, como otros tipos de cáncer, a la vez que se da apoyo a la Asociación Española contra el Cáncer, que tanto ayuda en su caminar a quienes lo padecieren y lo dejaron atrás.

El lazo rosa, o la camiseta del mismo color, es un símbolo internacional utilizado por personas a título individual y colectivo, asociaciones y organizaciones que se comprometen a crear conciencia sobre el cáncer de mama. El primer lazo rosa fue introducido por la Fundación Susan G. Komen, del cáncer de mama, que a finales de 1990,  regaló viseras rosadas a los sobrevivientes de este cáncer que corrían una maratón para su cura.

El Día Mundial del Cáncer de Mama lo estableció la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 1998 con el objetivo de sensibilizar a la población sobre esta enfermedad. Se celebra en todo el mundo y contribuye a aumentar la atención y el apoyo prestados a la sensibilización, la detección precoz, el tratamiento y los cuidados paliativos. Cada año se registran 1,38 millones de nuevos casos y 458.000 muertes, la mayoría de ellas en personas de ingresos medios y bajos, con diagnósticos en casos avanzados, debido a la falta de sensibilización sobre la detección precoz y los obstáculos al acceso a los servicios de salud.

Aunque es poco frecuente, los hombres también pueden presentar cáncer de mama. El riesgo de presentar este cáncer en los hombres puede devenir por el envejecimiento (a partir de los 50 años), mutaciones genéticas, antecedentes familiares, radioterapia en el tórax, terapia hormonal, sobrepeso y enfermedades hepáticas.

Un número considerable de mujeres y hombres, como en otros pueblos y ciudades de la región, llevaron el lazo o la camiseta rosa, símbolo por la sensibilización del cáncer de mama, el más común de los cánceres, según la OMS, junto a los de pulmón, colorrectal y próstata.


miércoles, 1 de noviembre de 2023

JOSÉ MARÍA MUÑOZ Y BAJO DE MENJÍBAR, HIJO PREDILECTO DE CABEZUELA DEL VALLE


José María Muñoz y Bajo de Menjíbar (Cabezuela del Valle, 08/04/1814; Alicante, 08/06/1890) fue un empresario y filántropo español, conocido por su labor benéfica tras las inundaciones de 1879 en Levante.


Nacido el 8 de abril de 1814 en la localidad cacereña de Cabezuela, era hijo de Alonso y María. Estudió en colegios de Guadalupe y en los Seminarios conciliares de Coria y Plasencia para ser eclesiástico; pero dejó la carrera sacerdotal y emprendió la de las armas a principios de 1834 con motivo de la primera guerra carlista, conocida como Guerra de los Siete Años o primera guerra civil, entre los carlistas partidarios del infante Carlos María Isidro de Borbón y de un régimen absolutista, y los isabelinos o cristinos, defensores de Isabel II y de María Cristina de Borbón.


El triste fin de la muerte de su padre (fue fusilado en Plasencia el 5 de mayo de 1834), sacrificado en la fratricida lucha civil por seguir la causa del tradicionalismo, le exasperó de tal modo que no pudo dominar su tradicional modo de ser y abandonó las aulas para seguir la causa por la que su padre perdió la vida. El exseminarista de Plasencia, viéndose constreñido en Portugal para realizar sus intentos, pasó a Francia para incorporarse a las filas del Pretendiente en las asperezas de Navarra, foco entonces de las huestes de Carlos María Isidro de Borbón. Vio cómo su tío, Francisco Muñoz, militaba en las filas contrarias con su hijo Manuel, capitán de Caballería.


José María Muñoz se alistó en las filas carlistas y terminó abandonando la frontera de Portugal para ir a Italia y de allí a Francia.. Al salvar los Pirineos de noche, fue hecho prisionero por las tropas francesas, al mando del general Arispe, allí acantonadas de observación contra los carlistas, e internado y conducido a Périgueux, de donde se escapó a los pocos días, y atravesando de nuevo Francia, logró entrar en Navarra e incorporarse al ejército del Norte, donde fue hecho preso por sus camaradas por sospechas sobre su identidad. Gracias a la intervención del coronel Fulgencio de la Cuesta, amigo de su padre, que garantizó su inocencia, fue recibido en las filas carlistas después de seis días de prisión en las cárceles de Lesaca, y fue destinado al batallón núm. 3 de Navarra, llamado del Requeté.


Soldados de la Guerra carlista

Terminada  la primera guerra carlista con el convenio de Vergara (1839), Muñoz emigró a Francia. De vuelta a España, contrajo matrimonio con Carlota Ortiz, natural de Gerona, con quien tuvo cuatro hijos. Su esposa falleció muy pronto, así como dos de los hijos. Realizó una serie de proyectos que le hicieron acumular una notable fortuna: construyó una fábrica de fundición de hierro en la frontera con Portugal, negoció en harinas en Barcelona; se hizo contratista de tabacos en Cádiz; trató en ganados por tierra de Burgos; explotó minas de estaño, con actividad en la provincia de Zamora; y construyó varias casas en Madrid.


En su pueblo natal construyó un hospital, dos escuelas, una casa de maternidad, seis dotes de 6.000 reales para casamiento; tres carreras sostenidas de sacerdote, abogado y médico; enseñanza de instrucción primaria para tres jóvenes que, por su aplicación, se consideren aptas para el magisterio; un barrio para familias pobres, reformó la casa municipal y restauró los santuarios arruinados de la Virgen de Peñas Albas y Santiago Apóstol. Además, socorrió a las familias más pobres del pueblo y cuantos imploraban su caridad. Para todo esto solicita la protección tutelar del Gobierno y la creación de una Fundación, presidida por el obispo de Plasencia, la cual se hará cargo con este fin de cinco millones de reales nominales. El Ayuntamiento le proclamó hijo predilecto de la villa en sesión extraordinaria y le apellidó “protector de los pobres”.


Tras las inundaciones del 14 de octubre de 1879 en el Levante español, repartió una gran suma de dinero entre los afectados, además de otras labores benéficas. Conmovido por el alcance del desastre, puso a disposición de los damnificados más de dos millones de reales de vellón, que repartió entre las localidades afectadas: Orihuela, Murcia, Cuevas de Almanzora, Huércal-Overa, Lorca, Águilas… que le aclamaron como hijo adoptivo, le dedicaron calles y le rindieron homenajes, extendido también a Alicante, donde levantó el Barrio de la Caridad. El Gobierno le otorgó la Gran Cruz de Beneficencia. Fue conocido como el Héroe de la Caridad.

------------------------------------------------

 Bibliografía consultada: El Diario de Murcia, de 13/06/1890; Félix Carrillo Camacho: Galería de españoles ilustres. José María Muñoz y Bajo de Menjíbar, retrato biográfico del héroe de la caridad, Tomo I, Madrid, 1885. Fernando Flores del Manzano: José María Muñoz, un extremeño en el olvido, en Hoy, del 08/04/2014. Nicolás Díaz y Pérez: Diccionario histórico, biográfico, crítico y bibliográfico de autores, artistas y extremeños ilustres, II, Madrid, Pérez y Boix editores, 1884-1885.