jueves, 4 de julio de 2019

MARGARITA XIRGU, LA ACTRIZ QUE ABRIÓ EL FESTIVAL DE MÉRIDA


Margarita Xirgú en Medea.
Archivo Museo de Badalona
Margarita Xirgu Subirá (Molins del Rey, Barcelona, 18/07/1888; Montevideo, 25/04/1969) fue una actriz española de teatro y cine, directora teatral, española y uruguaya de nacionalidad, asociada con las obras de García Lorca, a quien conoció en el verano de 1926, y con el Festival de Teatro Clásico de Mérida, cuya actuación en 1933 marcó el comienzo de su segunda reapertura de la era moderna.[1] Hija de Pedro Xirgu y Martí y Josefa Subirá Polls, obreros gerundenses que habían recorrido varios barrios del cinturón industrial de Barcelona, hasta asentarse en Molins del Rey, donde vio la luz el año de la primera Exposición Universal de Barcelona y el año en que tuvo lugar el congreso constituyente de la UGT, se instaló con su familia en Barcelona al cumplir 8 años. En septiembre de 1919 se casó con Josep Arnall, quien falleció en La Habana en 1936. Cinco años más tarde se casaría con su amigo Miguel Ortín, del que ya no se separaría. En 1907 falleció su padre y Margarita se hizo cargo de la familia.

            Los ateneos obreros constituyeron su universidad popular, donde comenzó a hacer teatro con grupos de aficionados, en parte gracias a su padre que pertenecía al Ateneo del Distrito V y de quien aprendió que la improvisación era muy valiosa siempre que estuviera sustentada por la disciplina. Su revelación como actriz se produjo en la obra Teresa Raquib, de Zola, en 1906. En 1910 formó su propia compañía y estrenó, entre otras, Andrónica y La reina joven, en el Teatro Romea, el más prestigioso de Barcelona. En 1914 dio el salto a Madrid, donde trabajó en el Teatro Español, con obras de Valle-Inclán (Divinas palabras, 1933), Bernard Shaw, D´Anunnzio, Alejandro Casona y García Lorca,  de quien fue asidua colaboradora y que estrenó con ella sus obras más importantes: Mariana Pineda, con decorados de Salvador Dalí (1927), La zapatera prodigiosa (1930), Yerma (1934), Doña Rosita la soltera y  El lenguaje de las flores (1935) y el reestreno de Bodas de sangre (1935). Xirgu será la piedra angular del teatro lorquiano. La actriz dio aliento a esa coral de mujeres marginadas por la opresión generada por estructuras sociales y formas de vida anquilosadas, que Lorca denunciaría repetidamente. El dramaturgo granadino dijo de ella: "Debo a Margarita cuanto he logrado en el teatro." [2] Con motivo de una visita a Mérida en 2008 para impartir una conferencia dentro del ciclo organizado por el Festival de Mérida, la biógrafa de Xirgu decía de ella: "Fue una actriz innovadora que se adelantó a su época. Fue una mujer revolucionaria, porque creyó que debía servir a su otra religión, que era el teatro." [3]

            En la primavera de 1932, Margarita Xirgu estrenaba el drama El otro, de Unamuno. A raíz del estreno en el Teatro Español, Fernando de los Ríos, que había comentado el olvido que se tenía a Séneca como autor dramático, el rector de Salamanca le entregó a la actriz la versión castellana de la tragedia Medea, que se estrenó el 18 de junio de 1933 en el Teatro Romano de Mérida, que marcaría el comienzo del Festival de Teatro Clásico en la capital extremeña. La Compañía Xirgu-Borrás estrenó con clamoroso éxito la obra. A Mérida llegaron el presidente de la República, el ministro de Instrucción Pública, el director de Bellas Artes, el alcalde de Madrid, el embajador de Italia,  --que entregó una corona como regalo de Roma a Mérida-- y destacadas personalidades de la intelectualidad y el arte. El teatro acogió a más de 3.000 espectadores. Azaña escribió en su diario: "Ayudaba la suavidad de la tarde, suave y luminosa, transida por los rayos del poniente. Tan solo discordaba el silbo de los trenes; pero de todo podía uno abstraerse, en cuanto empezó la función, y el público entero cayó en un silencio maravilloso apenas vio aparecer en escena a la feroz Medea. La Xirgu ha sacado fuerzas de flaqueza física; no creía yo que llegase a tanto... Anochecido, y estando el cielo tenue y transparente, volaban sobre el teatro las cigüeñas. Fue el mejor momento. La escena final --ya cerrada la noche-: el incendio, las teas, las masas corriendo por entre la prestigiosa arquitectura, produjo un efecto fulminante. El público estalló en aplausos clamorosos." El Ayuntamiento de Mérida nombró a Margarita Xirgu y a Enric Borrás hijos adoptivos de la ciudad.  El éxito de Medea en Mérida no se apagó. Xirgu la representó en la Plaza de la Armería del Palacio Real de Madrid y en el Teatro Grec de Montjüic de Barcelona. En septiembre de 1934 se celebró el II Festival del Teatro Romano de Mérida: el lunes 3 y el viernes 7 de septiembre, la Compañía Xirgu-Borrás representó Medea y el miércoles 5 y el sábado 8, Elektra (sic).[4] Para Sandra Ferrer, el nombre de Margarita Xirgu está estrechamente ligado al del Teatro Romano de Mérida, del que se quedó profundamente enamorada. En 1926, en un viaje por Badajoz, la actriz visitó Mérida y se quedó profundamente enamorada de su teatro romano. Su intención de devolverle la vida a aquellas ruinas y volver a representar obras de teatro no fue fácil; pero gracias a la complicidad de Unamuno, quien escribió para ella la versión de Medea, consiguió convencer a los responsables del teatro.[5]

            Poco antes del inicio de la Guerra Civil, Xirgu emprendió una gira por Sudamérica con obras de Lorca. En 1937 representó Yerma y Doña Rosita en el Teatro Odeón de Buenos Aires y en 1938 actuó en la película argentina Bodas de sangre. Con el triunfo franquista en 1939, Margarita Xirgu se exilió, viviendo en Chile, Argentina y Uruguay. En Montevideo representó obras de autores españoles y fue nombrada directora de la Escuela Municipal de Arte Dramático, en la que se formaron actores de la talla de Amelia de la Torre, Cándida Losada, Enrique Diosdado, Alberto Closas y Sancho Gracia. [6] Closas (Barcelona, 1921; Madrid, 1994), contaba en un programa televisivo de Canal Extremadura, emitido el 02/02/2017, con motivo del 80 aniversario del dramaturgo extremeño Manuel Martínez Mediero (Badajoz, 1937), que la invitó a volver a España para interpretar juntos una obra de Mediero que le había enviado. Xirgu le contestó que "había leído la obra con sumo agrado", diciéndole que "Mediero es un autor que dará mucho que hablar", rogándole que le enviara más obras suyas.[7] En Montevideo, donde permaneció los últimos veinte años de su vida, le pusieron su nombre a la Escuela Multidisciplinaria de Arte Dramático. En 1988 sus restos fueron repatriados por la Generalidad de Cataluña y descansan en su municipio natal. Numerosas ciudades españolas, además de Mérida, que la hizo hija adoptiva, le dedicaron calles con su nombre y en Buenos Aires y Alcalá de Henares, sendos teatros llevan también su nombre.

            La consejera de Turismo y Cultura de la Junta de Extremadura, Leonor Flores, y el alcalde de Mérida, Ángel Calle, loaron la figura y el legado de Margarita Xirgu tras descubrir una estatua en bronce de la actriz que quedó situada en la versatura oriental del Teatro Romano de Mérida.[8]
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[1] El Teatro Romano de Mérida fue inaugurado hacia los años 16-15 a. C. a instancias del cónsul Agripa, yerno del emperador Augusto. Sufrió varias remodelaciones, la más importante durante el siglo I a. C. y la segunda en época de Constantino. Fue abandonado en el siglo IV de nuestra  era, tras la oficialización de la religión cristiana en el Imperio, que consideraba inmorales las representaciones teatrales. Demolido parcialmente y cubierto de tierra, durante siglos la única parte visible del teatro fueron las gradas superiores, conocidas como Las Siete Sillas. Los terrenos habían sido municipales hasta mediados del siglo XIX, pero la Desamortización los privatizó y el Estado tuvo que pagar a la familia Pacheco, dueño de los solares del Teatro y el Anfiteatro. (Caballero Rodríguez, José: Maximiliano Macías y su tiempo (1867-1934), Edic. Artes Gráficas Rejas, 2008).
 
[2] Vid.: Rodrigo García, Antonina: Margarita Xirgu Subirá, en Diccionario biográfico español de la Real Academia de la Historia.  Antonina Rodrigo (Granada, 1935) es autora de Margarita Xirgu. Una biografía, Edit. Flor del Viento, Barcelona, 2005.
 
[3]  Vid.: Ramos, Isabel: Xirgu fue una actriz innovadora, en El Periódico Extremadura, de 01/05/2008.
 
[4] Vid.: Rius Xirgu, Xavier: Margarita Xirgu 1933.1934, en http://margaritaxirgu.es/castellano/vivencia3/128/128.htm.
 
[5] Vid.: Ferrer Valero Sandra: La musa republicana, Margarida Xirgu (1888-1969), en https://www.mujeresenlahistoria.com/2012/06/la-musa-republicana-margarida-xirgu.html.
 
[6]  Vid.:  Rius Xirgu, Xavier en  http://margaritaxirgu.es/castellano/vivencia/14discip/discipul.htm. y http://www.tvcatalunya.com/elmeuavi/2003/xirgu/contenidotext.htm.
 
[7] Vid.: Pinero, Félix: Martínez Mediero, un clásico extremeño en el Teatro Romano de Mérida, en MeridayComarca, de 12/03/2017.
 
[8]  Vid.: Flores y Calle loan la figura de Margarita Xirgu tras descubrir la estatua en su honor en el Teatro Romano de Mérida, en  Europa Press, de 19/06/2008.


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