martes, 30 de diciembre de 2014

MONAGO: PODEMOS Y LO HACEMOS...

 
            El presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, con su proverbial tono de seriedad que le es impropio, se ha dirigido a los extremeños en su cuarto mensaje de fin de año con un discurso electoralista, por optimista, de balance de los tres años y medio de su gobierno y, más pensativo del próximo futuro, ha hecho un guiño a las formaciones políticas para llegar a futuros acuerdos, entre no los que no ha descartado al PP y PSOE y al PP e IU, "porque las escrituras del consenso no las tiene ningún partido político y los ciudadanos nos piden que hablemos y que acordemos".
 
            Sin embargo, ante una eventual necesidad de pactos para gobernar a partir de primavera, Monago ha dedicado la última parte de su intervención a la coalición emergente, de la que un día dijo que "sí pactaría", aunque ahora les recuerda que podría llegar  a acuerdos con ellos "siempre que respetaran mi única línea roja: lo mejor para Extremadura" y ha advertido a Pablo Iglesias que "el respeto que debemos cultivar también se lo merecen muchos españoles que no opinan en muchas cuestiones como ellos, y a los que se les falta diariamente a su dignidad, a su compromiso y a su memoria en la lucha por las libertades y la igualdad". En este sentido, tras recordar que "hay momentos en la vida en los que no caben las medias tintas ni el marketing", les ha retado a responder si apoyan sin complejos la Constitución, "aunque se quiera transformarla"; el respeto a las víctimas de terrorismo y la reprobación pública a ETA; y a expresar "rotundamente no" a la independencia de Cataluña. "A los españoles no nos gusta que nos traten como si fuéramos menores de edad", ha señalado, para concluir que "figuras como Adolfo Suárez y Felipe González, entre otros, han construido más España, como Adolfo Díaz-Ambrona y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, más Extremadura. Admiramos por ello su papel en nuestra historia y, en lugar de destruir el espíritu de la transición, a algunos les convendría incorporarse a él".
            Este párrafo con el que ha concluido su discurso sobraba en un mensaje de fin de año con elevado carácter electoralista. Con ello, el presidente no solo muestra su propia debilidad política y su miedo a perder, y donde antes dijo digo, ahora dice Diego. Atreverse a darle consejos a una coalición que ahora pinta más que él, es tanto como su osadía al asegurar que "el pueblo extremeño deberá decidir entre los que dicen que pueden y los que demostramos no solo que podemos, sino que además lo hacemos. Y cuando se hacen las cosas en Extremadura, las cosas se dicen solas". Flaco favor se ha hecho a sí mismo y a su partido al elevar a los altares al adversario temido e ignorar, de otro lado, al más próximo, el líder del PSOE regional y su antecesor en la Presidencia, Guillermo Fernández Vara, al que teme tanto como a aquel. Mire usted, señor presidente: las dos generaciones de extremeños nacidas tras la Constitución del 78 no saben quién es Adolfo Diaz-Ambrona, aunque fuere presidente regional de su partido y candidato frente a Ibarra a la Presidencia. Otro error de bulto por su parte.
            Por lo demás, qué novedades que no supiéramos -aparte de "podemos y lo hacemos"-- nos ha revelado el presidente: varias promesas. Comprometerse con los 17.659 jóvenes extremeños en paro a garantizarles su primer trabajo en Extremadura "si os formáis en uno de los sectores de la Estrategia de Especialización Inteligente de la economía"; y la creación, junto al sector privado, de más de 7.000 puestos de trabajo para ellos en la región si tienen Formación Profesional o una carrera universitaria. No se lo creen ni ellos, porque muchos ya se han ido cansados de esperar...
            Un Plan integral con varias medidas, que se concretarán en el primer trimestre del próximo año, para los más de 49.000 empleados públicos de la Comunidad; el Estatuto de Capitalidad de Mérida, para el que espera contar con el apoyo de todas las fuerzas políticas; la protección al campo extremeño; la nueva Ley Agraria, que unificará veinte leyes anteriores, ya en la Asamblea, "para tener "un campo del siglo XXI". Ha recordado, además, el impulso a las pensiones más bajas; la Renta Básica, "de la que se benefician más de 7.000 familias"; la ayuda, durante nueve meses, a las mujeres víctimas de la violencia de género, y la "pensión no contributiva" a 35.000 mujeres mayores de 75 años.
            No se entiende que presuma de haber tomado decisiones sin buscar el consenso que no necesitare. "Un gobierno en minoría del PP -ha recordado-  ha aprobado cuatro presupuestos en esta legislatura, con la mayoría absoluta de la Cámara", aunque reconoce que no es mérito propio, sino resultado del diálogo y la palabra. Se le olvida hasta el reconocimiento a la fuerza política que lo hizo posible. Le está bien merecido por apoyarle sin fisuras.
            Y nos da un consejo como reto: innovar, internacionalizar y formarse, "porque el mercado ya es el mundo: en la próxima década, unos 1.000 millones de personas se incorporarán a la clase media", y lo dice un presidente que pertenece a un partido que ha aniquilado a la clase media en España.
            Lo dicho: somos una región emergente, como la coalición a la que tanto teme y al líder al que ignora por más cercano adversario.
 

BIENVENIDO DE NUEVO, WOODY ALLEN

 
           Estaba ya en hora "prime time" (horario central televisivo en España, desde las 22.00 hasta la 1.00 de la madrugada) viendo una película en una cadena generalista, cuando la interrumpe un paréntesis publicitario. Hago lo que la ocasión demanda en estos casos: zapear por otras cadenas con el mando a distancia para ver si hubiere otra novedad más digna que atrajere mi atención. Y he aquí que mis ojos dan con aquella cuyo número todas demandaren para sí en la resintonización no finiquitada aún: la que va tras las seis generalistas; es decir, la televisión del presidente Monago, cuyos trabajadores han hecho huelga por la manipulación de sus informativos y la externalización de sus servicios, dejándolos a ellos como monigotes de papel sin ninguno estelar en horario central.
            Tenía desde muy temprana hora un gran desasosiego al no ver en ninguna parte qué día y a qué hora el presidente de la Junta de Extremadura, José Antonio Monago, pronunciaría su discurso de fin de año a los extremeños. Ni en la web de la Junta ni en periódicos digitales ni sus portavoces daban cuenta alguna de tal acontecimiento. Realicé alguna llamada, de la que no obtuve respuesta alguna hasta ya entrada la pasada madrugada; pero ya antes, gracias a mi zapeo, lo había descubierto: en la tele del "Aló Presidente" --similar al del presidente de Venezuela Hugo Chávez, que transmitía el Sistema Nacional de Medios Públicos  del hermano país todos los domingos desde las 11.00 a. m., hora local, hasta las 05.00 p. m.--, descubro que ponen la película "Misterioso asesinato en Manhattan", una exploración de Woody Allen en el género del suspense, estrenada el 18 de agosto de 1993. Había dado con la incógnita: se trataba de dar la bienvenida a Extremadura al director, guionista, actor, músico, dramaturgo, humorista y escritor estadounidense Woody Allen, ganador del Óscar en cuatro ocasiones, premio Príncipe de Asturias 2002, por su relevante aportación al patrimonio cultural de la Humanidad, que hoy llega a tierras extremeñas... ¿Será la primera vez quizá, gracias a nuestro venerado presidente?
            En el ángulo superior derecho figura el logotipo que identifica a Canal Extremadura, mientras que el ángulo superior izquierdo de la pantalla aparece, tras el escudo de la Comunidad, la siguiente leyenda, durante toda la proyección: "Mensaje del Pte. del Gobierno de Extremadura, José Antonio Monago. Martes: 20.15" (sic). Todo aclarado.
            Lo confirmo esta mañana del martes 30, penúltimo día del año: a las 20.15 horas, el presidente de la Junta de Extremadura, pronuncia su discurso de fin de año desde las bodegas "Habla" de Trujillo, que ya son ganas de fardar..., con permiso del buen vino al que solo le falta hablar. Y, por supuesto, a las 20.30, en Badajoz, el presidente asiste al concierto que Woody Allen ofrece con su banda, Orleans Jazz Band, en el Palacio de Congresos de Badajoz, en el que actuará también la banda extremeña de Mili Vizcaíno.
            El 9 de diciembre, Monago anunciaba urbi et orbi que Woody Allen actuaría con su banda en lo que llamó Concierto institucional de fin de año en Badajoz, dentro de su gira europea de este año, que le llevó a actuar ayer lunes en Montecarlo y  mañana en Barcelona. Este concierto, patrocinado por la Junta, el Ayuntamiento de Badajoz y Caja Almendralejo,  tendrá un carácter itinerante, según anunció, y en los próximos años tendrá lugar en Mérida y Cáceres, y "con él se pretende posicionar a Extremadura como centro cultural de España" y "vender el patrimonio cultural y artístico de la Comunidad Autónoma".
            Las reacciones no se hicieron esperar. El PSOE, por medio de su portavoz, Valentín García, considera "bochornoso" que "la Junta se gaste el dinero de los extremeños" en conciertos cuando hay extremeños pasando hambre y niños que no hacen tres comidas al día. El PREx-CREEx asegura que Monago "ha rematado" un mes pletórico de intervenciones en los medios con el tema de Woody Allen. Los partidos políticos instan a decir el coste del concierto, cifras que el presidente no ofreció durante el anuncio. El día 13, JJ SS de Extremadura recrimina al presidente que no lo diga y que calcula en medio millón de euros. El día 16, la vicepresidenta de la Junta, Cristina Teniente, da a conocer que el coste será de 135.248 euros, de los que la Junta aporta 72.127, el Ayuntamiento de Badajoz, 15.800; y Caja Almendralejo, 19.750, más IVA, además de los ingresos previstos en taquilla, 27.571, y tilda de faltar a la verdad a los dirigentes socialistas.
            No para ahí la cosa: el día 11 del presente, la Junta anuncia el patrocinio, con 96.800 euros, de la gira de conciertos en Extremadura del artista malagueño Pablo Alborán (Plasencia, 22 de mayo; Almendralejo, 14 de agosto), al igual que antes hiciera con Extremoduro y Huecco a través de la marca publicitaria Organics Extremadura. El día 16, Monago hace público que la Junta patrocinará con 15.000 euros a la banda de rock Sínkope, natural de su pueblo, Quintana de la Serena, que prepara nuevo disco y una gira por Hispanoamérica.
            El artista neoyorkino será recibido hoy por el presidente y por el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, que le darán la bienvenida --ya anticipada anoche con la proyección en la televisión pública de una de sus películas-- y le harán entrega de una reproducción de la pieza original "Árbol de la vida", que se encuentra en el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida, además de un libro en inglés titulado "Welcome back" (Bienvenido de nuevo) para que conozca la región de una manera "sencilla y directa", sus personajes históricos y embajadores culturales, desde el movimiento Fluxus de los 60, auspiciado por Vostell, hasta el emperador Carlos V, pasando por Hernán Cortés, Núñez de Balboa, Valdivia, Hernando de Soto o Francisco de Orellana hasta César Augusto, en el bimilenario de su nacimiento..., Badajoz, puente entre España y Portugal, y el desarrollo extremeño basado en la conjugación entre tradición y progreso. "Bienvenido de nuevo", si es que alguna vez estuviste en Extremadura, Woody.
 

viernes, 26 de diciembre de 2014

"SAUCEDILLA, ARTE E HISTORIA" Y LOS PÚLPITOS DE TRUJILLO

 
           Un pueblo es un compendio de su historia, del arte de sus monumentos, reflejos de su historia; su paisaje y tradiciones populares. Agavillar todo esto en una obra, es adentrarse no solo en la historia que le dio luz, sino en la intrahistoria que sostiene su propia entidad de población.
            El historiador José Antonio Ramos Rubio, en unión del profesor de Historia Antigua, Julio Esteban Ortega, y del fotógrafo artístico Óscar de San Macario Sánchez, acaban de dar a luz un nuevo libro que analiza el arte y la historia de Saucedilla, un pueblo cacereño, aledaño a la Central Nuclear de Almaraz, que ha visto crecer su censo de habitantes en un 61 por ciento entre los años 1980 y 2014, según afirma su alcalde, Urbano García Díaz, en el prólogo de la obra, un hecho excepcional en el mundo rural extremeño, que hacen del libro "una buena obra sobre la andadura histórica de Saucedilla", según reconoce el propio alcalde.
            Ramos Rubio continúa con esta obra una línea de investigación que no solo trata de poner en valor, sino de descubrir el arte y la historia, siempre tan unidos, como desconocidos, de los pueblos de la provincia cacereña. El cronista oficial de Trujillo, doctor en Historia del Arte, y académico correspondiente de las Reales de la Historia y de Extremadura de las Artes y las Letras, articulista y colaborador de DEX, cierra el año con dos libros que sumar a los anteriores que vieren la luz en julio y agosto pasados: "Deleitosa, arte e historia" y "Santiago del Campo, una villa en la penillanura cacereña", que eleva a más de setenta el censo de sus obras publicadas. El último del año,  "Trujillo y los pueblos de su tierra: estudio de los púlpitos como elemento litúrgico y artístico", con prólogo del profesor Julio Esteban Ortega y la colaboración fotográfica de Óscar de San Macario, es el primer tratado sobre este tema que sale a la luz en España, según recuerda el prologuista, profesor de la Universidad de Extremadura.
            La recopilación de la historia y el arte de nuestros pueblos no está nunca de más ni es baladí, como creen los menos. Tal tesis nos llevaría a considerar los archivos --civiles y eclesiásticos-- y las bibliotecas, que reúnen la historia y el arte de nuestros pueblos, como algo en desuso, que nadie ve; pero en los que algunos historiadores y estudiosos dedican horas de estudio, para que esa historia y ese arte, testimonios del pasado, sean conocidos por todos y el libro sea instrumento de concisión para el conocimiento de la rica heredad que atesoran nuestros pueblos, que no puede perderse.
            Todos tenemos nuestra pequeña historia. De cuando en cuando, hemos de acudir a los archivos a solicitar una partida que certifique la verdad de algún acontecimiento de nuestra vida. Ni siquiera guardamos en casa una copia de esa mínima parte de nuestra historia, como un carné que certifica nuestra existencia, u otro que validare nuestra pertenencia a algún club o asociación, o nos permitiere conducir un vehículo. No podemos perderlos y cada cierto tiempo tendremos que renovar su existencia. Son parte de nuestra historia, esa historia, como el arte de nuestros pueblos, que José Antonio Ramos y Óscar de San Macario están descubriendo para sus vecinos y para todos; para la historia y el arte mismos de nuestros pueblos que la hicieron.
            Por lo demás, José Antonio Ramos, con su extensa producción científica, se está haciendo ya un lugar para ser académico de número de la Real de Bellas Artes de San Fernando y la de Extremadura, que otros, con menos méritos, ya ocuparen.
 
 

jueves, 25 de diciembre de 2014

PREOCUPACIONES Y RETOS EN EL DISCURSO DEL REY

 
           En su primer discurso dirigido a los españoles en Nochebuena tras su proclamación como rey, Felipe VI de España ha entroncado, como en sus discursos anteriores más importantes del año --el día de su proclamación, 19 de junio, o en su discurso ya como rey, en la entrega de los últimos Premios Príncipes de Asturias 2014, el 24 de octubre pasado-- con los graves problemas que atenazan a los españoles y a los retos de futuro que, aunque "no fáciles, tenemos coraje y capacidad de sobra" para superarlos, con "el deseo, la voluntad y la confianza en nosotros mismos".
            Quienes esperaban del rey alusiones a problemas que afectan a instituciones y personas, alguna de las cuales les son cercanas, o una puesta en escena distinta y distante de anteriores discursos navideños, se han visto defraudados en sus expectativas, pero pueden interpretar sus respuestas entre líneas, sin alusión alguna a nadie; pero quienes le seguimos y le vamos conociendo, sabíamos de antemano que no pasaría por alto ningún tema que preocupa a todos ni tampoco ningún reto de los que la sociedad española tiene planteados hoy, con la sintonía de un hombre de su tiempo y un monarca que desea ser "el primer servidor de los españoles".
            Uno de los asuntos que más preocupa a la sociedad española, la corrupción, ha sido uno de los primeros abordados por el monarca con énfasis, firmeza y decisión, con la rotunda afirmación de que "debemos cortarla de raíz y sin contemplaciones". Para el monarca, en la necesidad de "regeneración de nuestra vida colectiva, la lucha contra la corrupción es un objetivo irrenunciable" y "aunque es cierto que los responsables de esas conductas irregulares están respondiendo de ellas, como prueba del funcionamiento de nuestro Estado de Derecho",  ha advertido que "los ciudadanos deben estar seguros de que desempeñar un cargo público no sea un medio para aprovecharse o enriquecerse", lo que algunos han interpretado como velada alusión a los problemas judiciales por los que atraviesa la infanta y su marido. Ya no podría decir, como su padre, el rey emérito Juan Carlos I, que "la justicia es igual para todos". Lo es, y nadie debe coartar ni cercenar su camino en la búsqueda de la verdad para impartir Justicia. "La corrupción, en fin, debemos cortarla de raíz y sin contemplaciones."
            Sobre la crisis y el paro, el rey ha dado un tirón de orejas a quienes ya predican su fin o a quienes quieren ver la luz al final del túnel. "La situación económica continúa siendo un motivo de grave preocupación para todos; los índices de desempleo son todavía inaceptables y frustran las expectativas de nuestros jóvenes y de muchos más hombres y mujeres que llevan tiempo en el paro". El rey ha puesto de relieve que "la lucha contra el paro debe continuar siendo nuestra gran prioridad, porque la economía debe estar siempre al servicio de las personas" y porque "debemos seguir garantizando nuestro Estado de Bienestar".
            Sobre Cataluña y su desafío soberanista al Estado, ha sido claro y rotundo: "Formamos parte de un tronco común del que somos complementarios los unos y los otros, pero imprescindibles para el progreso de cada uno en particular y de todos en su conjunto... Nadie en la España de hoy es adversario de nadie... y la fuerza de esa unidad es la que nos permitirá llegar más lejos y mejor en un  mundo que no acepta la debilidad ni la división de las sociedades".  Ha subrayado, además, que "millones de españoles llevamos a Cataluña en el corazón, como también para millones de catalanes los demás españoles forman parte de su propio ser. Por eso me duele y me preocupa que puedan producirse fracturas emocionales, desafectos o rechazos entre familias, amigos y ciudadanos". El monarca ha invitado a "seguir construyendo todos juntos un modelo que respete nuestra pluralidad y genere ilusión y confianza en el futuro".
            Y, finalmente, el rey ha subrayado que "somos una democracia consolidada, disfrutamos de una estabilidad política como nunca antes en nuestra historia; nuestro marco constitucional nos ha permitido la alternancia política basada en unas elecciones libres y democráticas", y ahora nuestra esperanza son nuestros retos de mañana y futuro: regenerar la vida política, recuperar la confianza de los ciudadanos en las instituciones, garantizar nuestro Estado del Bienestar y preservar nuestra unidad desde la pluralidad.
            Todo dicho, aunque algunos habrá que echen de menos otros asuntos; pero el rey reina, no gobierna; coincide con partidos, sindicatos y asociaciones ciudadanas en los grandes temas del país, que ellos, y no él, deben sacar adelante con diálogo y altura de miras;  y se despide de todos con un "feliz Navidad" en las cuatro lenguas del Estado.
 

miércoles, 24 de diciembre de 2014

LA LUZ EN NUESTRAS VIDAS

 
           A la espera del discurso del Rey en su mensaje de Nochebuena de esta noche, nos ha sorprendido gratamente la felicitación del ex presidente de la Junta y presidente del Grupo Parlamentario Socialista en la Asamblea de Extremadura, Guillermo Fernández Vara. Había escrito el martes un post en su blog titulado "¿Navidad o navidad?", dedicado a todos los que son navidad y no lo saben, en la que da la vuelta a los símbolos de la Navidad para centrarlos en las personas. "Tú eres --decía-- la mejor noche de Navidad si crees que la justicia, la paz y la solidaridad son razones suficientes para dedicarles una gran parte de nuestra vida", y les deseaba "feliz Navidad sobre todo a los que se parezcan a esta navidad", una exclusión que sobra en un mensaje lleno de humanidad, que parece corregir al coro de ángeles que proclamó: "Paz en la tierra a los hombres de buena voluntad." Como sobraba aquel aviso en otro post, en el que afirmaba que, cuando dejara la política, enviaría correos de despedida con los insultos recibidos por parte de políticos, y hasta de algún que otro periodista, como para recordarles una presunta felonía, al decirles adiós, que expresa, de otro lado, el mejor deseo del mundo: vaya usted con Dios, que Dios le acompañe siempre. No sea usted rencoroso ni mire al pasado con nostalgia, como afirma en su felicitación navideña a los extremeños, espléndida en la realización y montaje, que nos ofreció ayer. Ni desee parecerse a otros en la noche de paz, predicando, de un lado, la transparencia y la luz en las personas, para después quitárselas, como si esa luz no iluminare su camino. Deje que los gallos canten para recordarles sus traiciones al pueblo a quienes así obran, pero no emule su conducta.
          Ha bajado el político a la arena, como pocos lo hacen; ha ido al encuentro de la gente, que descansa en el parque, junto al Guadiana, en la capital de Extremadura, donde reside por voluntad y vocación; se ha sentado a su lado; ha hablado con ellos de lo que hablaban; les ha insuflado esperanza; les ha dicho, en fin, que las luces de Navidad no están en las calles ni en los árboles, sino en nuestras vidas. Les ha hablado de una tierra en la que el mejor capital es su gente: los jubilados por su experiencia; los niños, por su futuro.
          Sabe, por experiencia, que ya no hay otro mejor mitin que escuchar. Los ciudadanos ven a los políticos lejanos, alejados de sus preocupaciones y problemas; y, por primera vez, hemos visto a un político que va a su encuentro, que dialoga con ellos, que acaricia la mano de una niña; que concluye su conversación con un paseo, todos juntos, arrimados a un árbol de la vida, a veinte árboles de luces de Navidad.
          Les dice que comparte sus prioridades, pero recuerda los problemas que no será fácil resolver en poco tiempo. "No miremos al pasado con nostalgia, que no va a volver... Mejoremos el presente con humildad y sabiduría, y vayamos al encuentro del futuro con tranquilidad. No está en juego que ganemos o perdamos: está en juego que nuestros padres y nuestros hijos sientan que no les hemos fallado. No le tengo ningún miedo al futuro de nuestra tierra si somos capaces de entender que el mejor valor es su gente..." No se puede decir más con menos palabras. No son las luces de Navidad que están en las calles, sino las que deben iluminar nuestras vidas, la luz en nosotros mismos, no la codicia que a otros ciega.
      
 

jueves, 11 de diciembre de 2014

EL DÍA EN QUE SE CASÓ FABIOLA

 
           Fabiola de Mora y Aragón (Madrid, 11/06/1928-Bruselas, 05/12/2014), nacida en el madrileño Palacio de Zurbano (actual sede del Ministerio de Fomento) y fallecida el pasado viernes a los 86 años de edad, será enterrada mañana viernes en la capital belga tras el funeral que se oficie en la catedral de san Miguel y santa Gúdula de Bruselas. Sus restos mortales, que descansaban desde su fallecimiento en la capilla del palacio de Laeken, a donde fue trasladada desde su muerte, ocurrida en su residencia del castillo de Stuyvenberg, han permanecido desde el miércoles en el palacio real de Bruselas para que los belgas pudieran despedirse de ella durante dos días.

               Fabiola dejó de llamarse De Mora y Aragón para denominarse Su majestad Fabiola, la reina de los belgas, desde su matrimonio con el rey, y hasta su muerte (1960-1993) y, a partir de entonces, Su majestad la reina Fabiola de Bélgica.
 
            El 15 de diciembre de 1960, el rey Balduino de Bélgica, primogénito del rey Leopoldo III, contrajo matrimonio con Fabiola, ceremonia oficiada en la catedral, a la que asistieron, entre otros, las reinas de Inglaterra y Holanda, el conde de Barcelona y su hijo, el príncipe Juan Carlos; y los marqueses de Villaverde en representación del Generalísimo Franco, que le regaló una tiara ducal. con diadema de brillantes, rematada por siete florones, con centros de rubíes y esmeraldas, que los joyeros de la Casa Real belga descubrieron que eran falsas, y que el Gobierno español se comprometió a cambiar por otras auténticas.
 
            La boda de Fabiola con el rey de los belgas conmocionó a una España todavía empobrecida, y cuyas mozas soñaban con desposarse con un príncipe azul, que las sacara de su vida de cenicientas, mientras que Fabiola, aun de familia aristócrata, bendecida en Lourdes tras su encuentro con el rey, lograba el sueño de ser esposa de un rey reinante, en un país que no fuere el suyo, pero del que se enamoró, y al que enamoró, durante treinta y tres años y medio, como reina consorte.
 
          Aquel día, el país entero seguía la ceremonia de la boda por TVE --fue la primera retransmisión televisiva exterior desde el ingreso del Ente Público en Eurovisión en 1959--; y la gran mayoría, la escuchaba por la radio. Los niños fueron a clase, con sus maestros más pendientes de la ceremonia. Tan solo cuando falleció el doctor Marañón --el gran científico y pensador español, que perteneciere a cinco de las ocho Reales Academias de España: Lengua, Historia, Bellas Artes, Medicina y Ciencias Exactas, Físicas y Naturales--, el 27 de marzo del mismo año, se les comunicó que no tenían clase en señal de luto decretado por el Gobierno.
 
         Mientras las niñas soñaban con sus cuentos de hadas, los niños no entendían nada. Antes de su boda, Fabiola de Mora y Aragón había publicado un álbum de doce cuentos de hadas, uno de los cuales, Los nenúfares indios, tendría su propio pabellón en el parque temático Eftelin (Holanda) en 1966. Ya adolescentes, los niños españoles comenzaron a tener noticias de la española reina de los belgas cuando pasaba sus vacaciones en Zarauz y, más tarde, en Motril, en Villa Astrida, situada en Playa Granada.
 
             Balduino I de Bélgica (Laeken, 1930; Motril, 1993) fue rey de los belgas desde la abdicación de su  padre Leopoldo III, en 1951, hasta su fallecimiento en 1993, en la ciudad granadina, de un ataque cardiaco. Al no tener descendencia, le sucedió en el trono su hermano menor, que reinó con el nombre de Alberto II, y que abdicó en favor de su primogénito, el príncipe Felipe, en julio de 2013.
 
            El 1 de agosto, Sus Majestades los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía se desplazaron a Granada desde su residencia veraniega del Palacio de Marivent, en Mallorca, para despedir al rey Balduino, al que le fueron rendidos honores militares por tres escuadrones del Ejército del Aire, por expreso deseo del monarca español, que le presentaron armas mientras sonaban veintiuna salvas de honor y la banda militar de la Academia General del Aire interpretaba la marcha fúnebre La muerte no es el final. El príncipe Alberto y el primer ministro, Jean-Luc Dehaene, repatriaron el cadáver del rey a su país en un avión de las Fuerzas Aéreas belgas, acompañando a la reina Fabiola.
 
           Don Juan Carlos y doña Sofía, según ha anunciado la Casa Real, estarán hoy jueves en el velatorio familiar en el Palacio Real, y mañana viernes asistirán en la catedral de san Miguel y santa Gúdula al funeral por la reina Fabiola, que se reunirá después "con su amor" en la cripta de Laeken.
 
              La reina, en Guadalupe
 
            En la hora de su muerte, hay que recordar su presencia en la misa mayor de la festividad de la Virgen de Guadalupe, el 8 de septiembre de 2008, oficiada por el entonces cardenal arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, y concelebrada por el arzobispo de Mérida-Badajoz y los obispos de Plasencia y Coria-Cáceres. La reina llegó cuando el cardenal había comenzado ya su homilía. Se formó un revuelo a su llegada. Cañizares esperó unos momentos, le dio la bienvenida y prosiguió la celebración. Su lugar estaba reservado. Fabiola no oía ni escuchaba: participaba, como siempre, sonriente en la celebración y en los cánticos. Como en el funeral por su marido, el rey Balduino, toda de luto blanco, como él le pidiera, y con la eterna sonrisa que a todos cautivare.
 

viernes, 5 de diciembre de 2014

LA ÚLTIMA DESAMORTIZACIÓN DE MÉRIDA

 
            La puesta a la venta de la residencia de los presidentes en la capital de Extremadura, en Mérida --sede de la Asamblea, de la Presidencia y de la Junta (artículo 5 del Estatuto de Autonomía de Extremadura, de la Ley Orgánica 1/2011, de reforma del Estatuto de Autonomía de la Comunidad Autónoma de Extremadura), parece retrotraernos al capítulo histórico de las desamortizaciones españolas, que tenían como fin, según el malogrado profesor Tomás y Valiente, "la apropiación por parte del Estado y por decisión unilateral suya de bienes inmuebles pertenecientes a "manos muertas" (la Iglesia Católica y las órdenes religiosas), la venta de los mismos y la asignación del importe obtenido con las ventas a la amortización de los títulos de la deuda".
            Ahora que la Junta pide al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) 178 millones de euros para saldar las deudas con los proveedores, a casi todo el mundo se le antoja --menos a Monago para apagar sus propios fuegos con su propuesta-- que la venta de la Moncloa extremeña por tan solo 2 millones, no solo sea oscuro objeto de deseo de especuladores, sino un argumento más para desamortizar Mérida como capital regional, al retirarle un símbolo más de su capitalidad, que le otorga el Estatuto, pero que hasta la fecha no se ha revestido con el Estatuto de Capitalidad; es decir, Mérida --como dicen muchos políticos y funcionarios que en ella sirven a la Comunidad-- es la capital política y administrativa regional por la mañana y, por la tarde, torna a ser el pueblo que siempre fue, porque nada se la ha dado por la capitalidad y lo poco que tuviere, se le quita, aunque también es cierto que la misma le ha dado una vida, y hasta un censo, del que antes careciere, aunque la mayoría no resida en ella.
            No se trata ahora de recordar las medidas desamortizadoras de Carlos III, o las desamortizaciones liberales del XIX (Bonaparte, las Cortes de Cádiz, el Trienio Liberal, Mendizábal, Espartero o Madoz), sino de esta otra, no por pequeña, o cara de mantenimiento, como arguyen sus promotores, tan significativa en un pueblo convertido ya en ciudad y en capital de Extremadura para salvar las diferencias de unidad de las dos provincias, siempre divididas en la historia: civil, eclesiástica, universitaria, militar... hasta que en 1833, el secretario de Estado de Fomento, Javier de Burgos, creara un Estado centralizado dividido en 49 provincias y quince regiones, entre ellas Extremadura, con las provincias de Cáceres y Badajoz, que sigue exactamente igual, excepto en la configuración administrativa y otros órganos de muy reciente creación, apegados al territorio, menos el eclesiástico, todavía dividido y repartido por otras comunidades colindantes.
            Los emeritenses se quejan, y nos les falta razón, no solo de que no le hayan dado un Estatuto de Capitalidad, como a Santiago, sino de que las instituciones surgidas al amparo constitucional, y circunscritas al ámbito territorial de la Comunidad, vayan todas a Badajoz, cuando la capital es Mérida: la Delegación del Gobierno, el Arzobispado de Mérida-Badajoz, la Jefatura Superior de Policía, la III Zona de la Guardia Civil..., todo para Badajoz; y hasta la residencia del presidente que, como un funcionario más, va y viene de Badajoz, su residencia, a Mérida.
            Los motines de la primavera de 1766, conocidos con el nombre de Motín de Esquilache, dieron lugar a las tímidas medidas desamortizadoras en tiempos de Carlos III. El entonces corregidor-intendente de Badajoz ordenó, para aplacar las revueltas, entregar en arrendamiento las tierras municipales "a los vecinos más necesitados...", lo mismito que Monago, que allí fuere segundo corregidor, que pretende entregar los beneficios de la  venta de la residencia de los presidentes a la capital de Extremadura, a falta de otras cosas más necesarias.
            La Ley 6/1997, de 14 de abril, de organización y funcionamiento de la Administración General del Estado (BOE de 15/04/1997) previó en su Capítulo II, Sección I, artículo 3 que "los delegados del Gobierno serán nombrados y separados por Real Decreto del Consejo de Ministros y tendrán su sede donde radique el Consejo de Gobierno de la Comunidad Autónoma, salvo que el Consejo de Ministros determine otra cosa y sin perjuicio de lo que disponga, expresamente, el Estatuto de Autonomía". Aparte del artículo 5, que fija la capitalidad en Mérida, el artículo 15.2 afirma que "son instituciones estatutarias, dotadas de autonomía orgánica, funcional y presupuestaria, el Consejo Consultivo (en Badajoz, según el Estatuto), el Consejo de Cuentas (con sede en Cáceres, según el Estatuto), el Consejo Económico y Social (en Mérida, según el Estatuto) y el Personero del Común (con sede en Plasencia, también según el Estatuto, por crear).
            La Archidiócesis de Mérida-Badajoz fue erigida por el papa Juan Pablo II el 28 de julio de 1994, restituyendo de este modo el antiguo arzobispado de Mérida y recogiendo el rico legado del obispado de Badajoz, y la conforman, junto a la metropolitana, las diócesis de Coria-Cáceres y Plasencia, aunque la Provincia Eclesiástica de Extremadura no está unificada aún con los límites geográficos de la Comunidad, de tal manera que se da la incongruencia de que la patrona de Extremadura y su santuario pertenecen a la metropolitana de Toledo. En la bula de creación, el papa dice que "el arzobispo metropolita podrá residir tanto en Badajoz como en Mérida y establecer las oficinas archidiocesanas  en uno y en otro lugar", que tampoco se cumple en su totalidad.
            La III Zona de la Guardia Civil (Extremadura) se crea por Real Decreto 367/1997, de 14 de marzo, por el que se determina la organización periférica de la Dirección General, que determina que habrá tantas zonas como comunidades autónomas y, en su artículo 2, crea la III Zona, correspondiente a la Comunidad, "con sede en Mérida"..., otro incumplimiento. Por Real Decreto 3486/2000, de 29 de diciembre, se modifican los artículos 3 y 6 del anterior y se asigna el mando de la Zona de Extremadura a un oficial general.
            Finalmente, la Jefatura Superior de Policía de Extremadura se creó por Orden INT/28/2013, de 18 de enero, por la que se desarrolla la estructura orgánica y funciones de los Servicios Periféricos de la Dirección General de la Policía (BOE de 24/01/2013) que, en su Anexo I, crea la Jefatura Superior de Policía de Extremadura, con sede en Badajoz, y ámbito territorial en las provincias de Badajoz y Cáceres... Claro, estando allí la Delegación del Gobierno, dónde iban a ponerla.
            Y ahora viene Monago con lo que faltaba. No lo consienta, alcalde. ¡Qué ejemplo da a los funcionarios...., como para quedarse a residir en Mérida! Y, mientras, la Policía guardándole las espaldas en una urbanización elitista de Badajoz, según denuncia el SUP.
 
 
 

jueves, 27 de noviembre de 2014

"EXCURSUS" EN EL TEMPLO DE LA PALABRA

 
            No es el presidente un prestidigitador de la palabra. Si lo fuere, no necesitaría acudir al "bis" ni a los "excursus" en el discurso político "coram populo" (delante del pueblo) para expresar "Deo coronatus" (coronado por Dios, para enfatizar el poder), que en modo alguno expresare el "desideratum" (el deseo máximo de cualquier persona, que no fuere otro que el de la felicidad). No solo hace coincidir su comparecencia, a petición del PSOE, con la del presidente del Gobierno para explicar las medidas anticorrupción en el Congreso, sino que pretende con ello que su quinta versión de los viajes a Canarias pase inadvertida ante la opinión pública, y cerrar un debate que, aun televisado, ahora sobraba, porque nada nuevo se ofrece, sino los "excursus" del discurso principal para cerrar el debate y dar carpetazo a un asunto del que se considera víctima y no parte.
            Monago acude reiteradamente al "excursus" (dentro de un discurso o texto, lo que se aparta del tema principal), no para volver al asunto objeto de la convocatoria, sino para distraer la atención con titulares que no venían al caso y que hoy y mañana compendian más que una digresión. El rigor de la tesis se aparta, de este modo, en dos "excursus" o afluentes con los que se viene a demostrar lo que se viene manteniendo con la autoridad de otros autores para volver al cauce principal de un Guadiana, que no solo pasa por Mérida, sino que parece más bonito a su paso por su residencia de Badajoz.
            Cada tesis doctoral ofrece, al menos, dos "excursus"; es decir, dos salidas de recurso para probar que el río principal de la tesis que se viene manteniendo, la sustentamos en autores que confirman lo que decimos. Volvemos, de nuevo, al cauce del Guadiana para continuar ofreciendo argumentos y llegar a la conclusión final, basada en obras, archivos, documentos probatorios de la causa y en autores clásicos del asunto que convierten las conclusiones en pruebas bastantes para que los diputados presentes en el templo de la palabra --el tribunal del examen-- apruebe o desapruebe lo que se trata de demostrar. Como si quisiere decir: "Indocti discant, et ament meminissi periti" (Apréndanlo los ignorantes, y recuérdenlo los entendidos).
            Con sus "excursus", Monago no solo no demuestra nada para someterse a examen, aun con sus cuatrocientos folios que solo uno ha podido examinar, ni a pesar de sus apariciones en televisión o en radio. Cuando toda la traducción queda sintetizada en dos titulares, que son  un excurso fuera de lugar, el presidente  --ahora sí-- da carpetazo definitivo a un incidente que solo ha provocado él, y no otros, como afirma. Que los titulares de la comparecencia vayan en sentido inverso al de la circulación, es, más que un "excursus" que nada prueba, una salida de tono injustificada. Véase en qué ha quedado el orden del día: "Monago pone en venta la residencia oficial como medida de ahorro"(El País); "Se vende la Moncloa extremeña" (El Mundo); "José Antonio Monago pone a la venta `La Moncloa´ extremeña" (El Confidencial); "Monago anuncia la venta de `La Moncloa´ extremeña" (Cadena Ser); "El Gobierno de Extremadura pretende vender la Residencia del Presidente" (Digital Extremadura); "Monago no justifica sus viajes y vende la residencia presidencial" (La Sexta); "La Junta venderá la residencia oficial del presidente" (Hoy); "Monago pondrá a la venta el `palacio presidencial´ de Mérida" (ABC); "Monago pondrá en venta la residencia oficial de los presidentes extremeños" (La Razón); y el más rotundo: "Monago intenta distraer la atención de los viajes a Canarias vendiendo el palacio presidencial extremeño" (público.es). "Mutatis mutandis" (cambiando lo que haya que cambiar") para que todo siga igual. El Pleno de la Asamblea se le fue de la mano, señor presidente, porque esto no estaba en el guión, y usted ha convertido el templo de la palabra de Extremadura en una inmobiliaria cualquiera. Todo lo demás, sobra. "Onmnes vulnerant, ultima necat" (todas hieren, la última mata). Quien le ataca a usted no ataca a Extremadura, porque usted no es Extremadura; es la representación del Estado en ella no "in aeternum", y solo usted se metió en este lío, no los diputados de la Comunidad, aunque no quiera someterse a su confianza perdida y no hallada en el templo de la palabra.
 

martes, 25 de noviembre de 2014

LAS NIEBLAS DE SANTA EULALIA

 
           Finales de noviembre, vísperas ya de su martirio, aflora el Guadiana desde Mérida hasta Cáceres las nieblas de santa Eulalia, las nieblas de la Mártir. Sin que apenas las farolas sean una luz brillante como una estrella, al amanecer, hasta que el sol levante el día y la niebla se difumine. Hasta después de Reyes --quizá más tarde aún--, entre Guadiana y el Salor, y entre Tajo y Guadiana, las mañanas se desperezan sin apenas luz en el horizonte, todo bruma, condensación de la humedad del aire reductora de la visibilidad horizontal; disminuye la visibilidad en superficie. Desde Nueva Ciudad, apenas oteamos el puente romano, la antigua Augusta Emerita, menos aún. Por la vieja Ruta de la Plata, paralela a la N-630, la conducción se hace peligrosa, nula la visibilidad, la niebla pegada a la carretera, los ojos cansados, fatigada la mirada..., cómo ver a Eulalia desnuda en su martirio, con las nieblas de la Mártir, las nieblas de santa Eulalia.
            Alcaldesa perpetua de la capital regional, Eulalia de Mérida (292-304 d. d. C), martirizada a los 13 años en Augusta Emerita, celebra entre nieblas su festividad el 10 de diciembre. Es patrona de la Archidiócesis de Oviedo, en cuya catedral reposan sus restos. Patrona principal de Mérida, de Totana, de Santa Olalla del Cala (Olalla, versión gallega de su nombre), fue patrona de Asturias hasta que se declaró como tal a la Virgen de Covadonga. Pleitearon Oviedo y Mérida por sus cenizas, según recoge Antón de Marirreguera en el primer poema asturiano de autor conocido, con letras del XVII.
            Nieblas de la Mártir, nieblas de Santa Eulalia..., según la leyenda cristiana, fue condenada a morir en un horno de cal viva; pero, antes, paseada desnuda por las calles de Augusta Emerita; pero su Dios, del que nunca renegare, tendió una extensa capa de niebla para que nadie la pudiere ver, aunque terminare en el horno. Desde entonces, desde hoy, hasta Reyes, el Guadiana evapora su masa de agua dulce y provoca, tierra adentro, la niebla, las nieblas de santa Eulalia, las nieblas de la Mártir.
            Hija de familia cristiana, al cumplir 12 años, el emperador Diocleciano prohíbe a los cristianos dar culto a su Dios. Se rebela Eulalia ante una ley tan injusta, que la obliga a adorar a los ídolos paganos del Imperio. Viendo el peligro, sus padres se la llevan al campo, orillas del Albarregas. Decidida, regresa a la ciudad; se presenta al gobernador Daciano y le expresa su protesta. Todos los requiebros fueron en vano. Sufre Eulalia trece martirios: azotes con correas de plomo; aceite hirviendo sobre sus pechos; fue rociada con cal viva y agua como abrasivo, sin sufrir daño; llevaron a su presencia una olla llena de plomo líquido y, tras mirar al cielo, el plomo se heló y sus esbirros se quemaron las manos. Sufre después azotes con varas puntiagudas; queman su cuerpo con hachas encendidas; la pasean desnuda por las calles de la ciudad; la llevan hasta la plaza de las ejecuciones, donde hoy está el Hornito; le arrancan las uñas de manos y pies y la ponen sobre una cruz, que levantan y dejan caer al suelo. Hachas encendidas abrasan sus costados. La niña virgen y mártir traga el fuego por su boca y de ella sale una paloma blanca hacia el cielo.
            El poeta Prudencio (siglo VI) narra sus martirios y escribe su himno, incluido en el Peristephanon, la más tardía de sus obras. También, en el siglo VI,  Idacio narra en su Chronica el martirio, como Gregorio de Tours en su Historia Francorum. Del mismo siglo es el códice de la Passio Eulaliae. En los siglos VII y VIII hay Glosas al himno de Prudencio. A Eulalia la canta el poema más antiguo en francés: Cantinèle de sainte Eulalie. La Crónica de Sampiro, según el obispo Pelayo de Oviedo, alude al traslado de sus restos a la ciudad. Eulalia de Mérida fue enterrada junto al Hornito, donde hoy se levanta su basílica; pero en tiempos de la dominación musulmana, sus restos fueron trasladados a Oviedo para preservarlos, y descansan en una arqueta situada en la Cámara Santa de la catedral.
            Prudencio la define en su himno:
            "Eulalia noble por su linaje,
            más noble su valor ante la muerte,
            sagrada doncella, tú con tus huesos
            das fama a Mérida, con cuyo abrigo
            creciste y con tu amor ella se orna."

            En "Martirio de santa Eulalia", García Lorca canta:
 
            "La rueda afila cuchillos
            y garfios de aguda comba.
            Brama el toro de los yunques,
            y Mérida se corona
            de nardos casi despiertos
            y tallos de zarzamora."
 
            Toda Mérida es Eulalia: la basílica, el Hornito, la Rambla, la calle más principal que une la plaza con su monumento..., sus nieblas ya presentes, para más memoria de su martirio y de la luz que diere a su ciudad.
 
 

viernes, 21 de noviembre de 2014

EL DUCADO DE ALBA Y LA COMUNIDAD DE VILLA Y TIERRA DE GRANADILLA

 
            En la sentida muerte de la XVIII duquesa de Alba, María del Rosario Cayetana Fitz-James Stuart y Silva (1953-2014), conviene recordar, aquí y ahora que sus antecesores, los condes y duques de Alba, fueron señores de la Comunidad de la Villa y Tierra de Granadilla (Cáceres) desde el 20 de enero de 1446 hasta 1830, con  Fernando Álvarez y Sarmiento, I conde de Alba de Tormes (1390-1464) hasta Carlos María Fitz-James Stuart y Silva, XIV Duque de Alba (1802-1835); es decir, durante 384 años, casi cuatro siglos de gobernanza de la antigua Granadilla y su Comunidad de Villa y Tierra, al frente de cuyo señorío estuvieron dos condes y catorce duques de Alba.
 
            La Comunidad de la Villa y Tierra de Granadilla estaba formada por diecisiete pueblos: Abadía, Ahigal, Aldeanueva del Camino, Caminomorisco, Cerezo, Granadilla, Granja de Granadilla, Guijo de Granadilla, La Alberca, Mohedas de Granadilla, Nuñomoral, Pinofranqueado, Ribera Oveja, La Pesga, Santibáñez el Bajo, Sotoserrano y Zarza de Granadilla.
            Sebastián Caballero González, que ha buceado en el archivo de los duques de Alba, en el Palacio de Liria de Madrid, afirma en su libro "Granadilla al hilo de la historia" (Caja Duero, Salamanca, 2004, págs. 86 y ss.)  que "Fernán Álvarez de Toledo, primer señor de Granadilla", además de su pertenencia a la familia Álvarez, fue también "el primero de este apellido en ostentar en el título de conde" y añade que "Juan II le designa como hombre de su confianza para que vaya a tomar las villas de Ledesma, Montemayor, Galisteo y Granada, que al parecer estaban en poder de los partidarios de los infantes de Aragón. Se lo manda el 24 de julio de 1444 mediante una real cédula, por la que ordena  a las ciudades de Ávila, Salamanca y Ciudad Rodrigo que se aliaran con el conde de Alba para ir a tomar las citadas villas. Parece ser --añade-- que mediante este documento, expedido desde el Real de Lagunilla, se ha interpretado que es la fecha de 1444 cuando Granadilla pasa a poder de la casa de Alba". Sin embargo, más adelante cita que  "por una cédula de Juan II, fechada en Toledo a 20 de enero de 1446, sabemos que este monarca le hace a don Fernán Álvarez de Toledo merced perpetua e irrevocable  de las villas de Granadilla y Miranda del Castañar".
            No han sido, empero, estos casi cuatro siglos de historia que han vinculado a la Casa de Alba con la Comunidad de Villa y Tierra de Granadilla, lo que las nuevas generaciones de extremeños recuerden, sino más bien hechos recientes, como la expropiación de las fincas Cabra Alta y Cabra Baja, propiedad de la Casa de Alba, que le fueron expropiadas por el Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura en 1980, al amparo de las leyes de Reforma y Desarrollo Agrario de 1973 y de Fincas Manifiestamente Mejorables. O, más recientemente, la visita de Cayetana de Alba para inaugurar en Cáceres la quinta edición de Expoparty en enero de 2012, a ella dedicada. (Véanse, además, los diarios regionales El Periódico Extremadura y Hoy de 21-11-2014:                     http://www.elperiodicoextremadura.com/noticias/extremadura/terrateniente-expropiada_839815.html y            http://www.hoy.es/extremadura/201411/20/expropiada-estrella-extremadura-20141120132749.html.)
            La Casa de Alba y Granadilla
     Casi nadie sabe que, entre 1473 y 1479, la Casa de Alba ordena construir el castillo, del que fue arquitecto y administrador de la obra el maestre Juan Salado. Tampoco que el 12 de enero de 1489, el duque de Alba Fadrique Álvarez de Toledo impuso una serie de medidas contra los judíos y árabes, que habitaban la villa, como llevar distintivos en sus ropas, legislar su apartamiento en juderías y morerías, vetar la venta de alimentos a los cristianos, la prohibición de trabajar en domingos y festivos cristianos, tener juegos... En 1492 los Reyes Católicos decretan la expulsión o conversión de los judíos y el 19 de diciembre del mismo año publican una carta de amparo que permite su retorno previa conversión al cristianismo, y la devolución de los bienes y deudas depositados en terceras personas. En 1833, por Real Decreto de 30 de noviembre, se crea la provincia de Cáceres, que ocupaba terrenos de la antigua provincia de Extremadura, y algunos lugares de las antiguas de Ávila, Salamanca y Toledo, La Alberca y Sotoserrano, feudos del señorío de Granadilla, son traspasados a la de Salamanca, incorporándose a la de Cáceres los pueblos salmantinos de Baños de Montemayor, La Garganta, lugares del señorío de Béjar, Robledillo de Gata y San Martín de Trevejo, en Sierra de Gata.
            El 1 de noviembre de 1835 se constituye la Diputación de Cáceres como institución administrativa de los intereses de los ayuntamientos, que convierte en obsoleta la existencia la Junta de Sesmeros de la Villa y Tierra de Granadilla, por lo que se ordena su disolución en 1837, adjudicando a cada pueblo del señorío los aprovechamientos de pastos y montaneras situados en su antiguos términos municipales. Ese mismo año se disuelve el Señorío de Granadilla por orden de la Diputación Provincial. En 1893, la Casa de Alba vende el castillo a Bartolomé Chamorro y Clemente. La documentación de los siglos XV al XIX de Granadilla se halla en el Palacio de Liria de Madrid en la caja 346.
            Los duques de Alba del Señorío de Granadilla
            Desde 1446, con el I conde de Alba de Tormes, Fernando Álvarez de Toledo y Sarmiento (1390-1464), el Señorío de Granadilla estuvo regido por el II Conde de Alba, García Álvarez de Toledo y Carrillo de Toledo (1472-1488), y los siguientes Duques de Alba: García Álvarez de Toledo y Carrillo de Toledo (1472-1478), Fadrique Álvarez de Toledo y Enríquez de Guzmán (1488-1531), Fernando Álvarez de Toledo y Pimentel, el Gran Duque de Alba (1531-1582), Fadrique Álvarez de Toledo y Enríquez de Guzmán (1582-1585), Antonio Álvarez de Toledo y Beaumont (1585-1639), Fernando Álvarez de Toledo y Mendoza (1639-1667),  Antonio Álvarez de Toledo y Enríquez de Ribera (1667-1690), Antonio Álvarez de Toledo y Fernández de Velasco (1690-1701), Antonio Álvarez de Toledo y Guzmán (1701-1711), Francisco Álvarez de Toledo y Silva (1711-1739), María Teresa Álvarez de Toledo y Haro (1739-1755), Fernando de Silva y Álvarez de Toledo (1755-1778), María del Pilar Teresa Cayetana de Silva Álvarez de Toledo (1778-1802), y Carlos Miguel Fitz-James Stuart y Silva (1802-1835).