Ana
Lobera Torres |
Beata Ana de Jesús |
, conocida en su vida religiosa como Ana de Jesús (Medina del Campo,
Valladolid, 25/11/1545; Bruselas, Bélgica, 04/03/1621) fue una religiosa
española, discípula de santa Teresa de Jesús, que continuó su obra tras su
muerte, fundando conventos de descalzas en Granada y Madrid y después en
Francia y Bruselas. Fue beatificada por el papa Francisco el 29 de septiembre
de 2024 en Bruselas.
Pertenecía
a una familia conocida entre la nobleza española, hija de Diego de Lobera y de
Francisca de Torres, y fue bautizada el mismo día que vino al mundo, ya que
nació sorda y muda, y así estuvo hasta los siete años, hasta que rompió a
hablar. A los pocos meses de nacer murió su padre y a los nueve años, su madre,
quedando junto a su hermano Cristóbal, que sería jesuita, bajo la tutela de la
abuela materna. Desde muy joven manifestó una clara tendencia a la
espiritualidad, que chocaba con las aspiraciones matrimoniales de su abuela.
Según sus biógrafas, en 1560, a los 15 años, intentando evitar la corte de
pretendientes, se marchó con su hermano a Plasencia para vivir con abuela
paterna, pero esta, como la otra, no entendía sus deseos de ser monja.
Compartía su vida de familia con jóvenes de su misma inclinación espiritual, ya
que su hermano fue jesuita; su prima María Lobera ingresó como carmelita
descalza y otra prima, María Cabrera, fue clarisa en Plasencia.
En
1563, recién instaurado el Colegio de la Compañía de Jesús en Plasencia, a los
18 años, se puso bajo la dirección espiritual de su fundador, el P. Pedro
Rodríguez y, bajo su dirección, comenzó a vislumbrar su clara vocación
religiosa, aun sin saber en qué Orden debía profesar. En 1569, el P. Rodríguez
fue destinado a Toledo, donde conoció la obra reformadora que llevaba a cabo la
madre Teresa, donde se encontraba realizando su quinta fundación. Ese año, Ana
enfermó de fiebre cuartana o malaria. En 1570, su confesor le escribió a
Plasencia informándole que Teresa de Ahumada fundaba conventos a la medida de
su ideal y ella contestó que le expusiera su vocación a la madre Teresa y le
dijera el convento donde tenía que profesar. Esta le responde que se cure de su
enfermedad y le recomienda Ávila, por ser ella la priora. Mientras esperaba su
respuesta, falleció su abuela materna en Medina del Campo y, un mes después de
recibirla, murió su abuela paterna en Plasencia, con lo que allanó el camino de
su vocación.
En
la homilía de su beatificación en Bruselas, el papa Francisco subrayó,
refiriéndose a Plasencia, que “en esta próspera tierra pudo florecer también el
testimonio de la monja carmelita Ana de Jesús. Esta mujer estuvo entre las
protagonistas, en la Iglesia de su tiempo, de un gran movimiento de reforma,
tras las huellas de una gigante del espíritu, Teresa de Jesús, del que difundió
los ideales en España, en Francia y también aquí, en Bruselas, que en aquellos
tiempos se llamaban los Países Bajos Españoles”.
El
31 de julio de 1570 se traslada a Ávila, donde toma el hábito de novicia el 1
de agosto, a los 24 años. Teresa de
Jesús había avisado desde Toledo que le impusieran el nombre de Ana de Jesús. A
mediados de agosto, la madre Teresa regresa a Ávila y conoce a quien sería una
de sus más ilustres hijas y defensora acérrima de su carisma. El 1 de
noviembre, Teresa de Jesús la envía a la nueva fundación de Salamanca. De
camino, en el convento de Mancera, conoce a otra persona que sería clave en su
vida: san Juan de la Cruz. El 22 de octubre de 1571 toma el hábito y profesa.
Al año siguiente, la fundadora la nombra sacristana y enfermera. En Salamanca
permanece hasta 1575 y convive estrechamente con Teresa de Jesús, con la que
establece un fuerte vínculo que duró hasta el fin de sus días.
En
febrero de 1575, la santa se la lleva a la fundación del Carmelo de Beas de
Segura (Jaén), de la que Ana es nombrada priora. El 21 de enero de 1582 funda
el Carmelo de Granada, donde san Juan de la Cruz fue elegido prior de los
frailes de Granada. En julio de 1586 abandona Granada en compañía del místico
para fundar en Madrid, donde inaugura el Carmelo de santa Ana el 17 de
septiembre de 1586.
En
1604 fue elegida para encabezar la expedición de carmelitas descalzas que
fundarían en Francia, El 18 de octubre inauguran el Carmelo de París; el 15 de
septiembre de 1605, el de Dijon y el 14 de mayo de 1606, el Carmelo de Amiens.
En
agosto recibe la petición de la infanta Isabel Clara Eugenia, hija de Felipe
II, para fundar en Bruselas, que acepta con la firme condición de llevar
también a los frailes carmelitas, El 22 de enero de 1607 inaugura el primer
Carmelo belga, del que fue priora hasta su muerte. El 4 de noviembre funda el
Carmelo de Lovaina y el 7 de febrero de 1608, el Carmelo de Mons.
Las
monjas de Beas fueron las primeras en adaptar los poemas sanjuanistas a las
melodías populares de su época para poderlas cantar. Una monja de esta
comunidad fue la que le inspiró las cinco últimas estrofas de su famoso Cántico Espiritual. La madre Ana le
animó a concluirlo, y a ella se lo dedicó. Sus superiores le encargaron
recopilar los libros de santa Teresa, dispersos en la Inquisición y en manos
particulares, para entregárselos a fray Luis de León, que se encargó de su
publicación. El autor de La perfecta
casada le dedicó a ella su Comentario
al libro de Job.
Tras
siete años de terrible enfermedad, en que se queda totalmente paralítica,
fallece a los 75 años, el 4 de marzo de 1621, en su Carmelo de Bruselas. Cuando
su cuerpo estaba expuesto en el coro, ocurrió su primer milagro: la curación de
una carmelita, Juana del Espíritu Santo, que estaba tullida, y, al besarlo,
comenzó a caminar.
El
14 de diciembre de 2023, el papa Francisco aprobó el milagro para la
beatificación de Ana de Jesús, atribuido a su intercesión.
----------------------------
Bibliografía
consultada: Yuste,
Belén y Rivas-Caballero, Sonnia
Laura, en Historia Hispánica, de la Real Academia de la Historia (https://historia-hispanica.rah.es/biografias/26660-beata-ana-lobera-torres); portal web
de la diócesis de Plasencia, de 1 de octubre de 2024; Ana de Jesús: la pupila de santa Teresa y san Juan de la Cruz ya tiene
milagro para su beatificación, en Vida
Nueva, de 14/12/2023