sábado, 26 de noviembre de 2016

LA MILITANCIA Y LOS MILITANTES

 
           Los políticos recurren más a la voz militancia que a la de los militantes, como si estos no formaren parte de aquella. Se considera que un militante pertenece a una determinada ideología, grupo o partido político, o que defiende una ideología concreta. Se es o no militante en favor de algo: es simpatizante del partido, aunque no milita, suele decirse, como aquellos otros que afirmaren: soy católico, pero no practicante...; es decir, que no milita en el cumplimiento de los preceptos de su iglesia. Militancia es la condición de militante. Deriva del latín: militaris, el que milita como soldado en un ejército; de ahí que entendamos como tal que la militancia presupone la condición de militante, quien brinda su apoyo a una causa o proyecto que figura en un partido o colectividad. La militancia es, pues, el conjunto de los militantes de una organización.
            Hay una diferencia sustancial entre militante y simpatizante. El militante es un soldado que colabora con una organización, movido por un sentimiento ideológico por el cual se siente identificado. Un simpatizante, empero, es aquel que está de acuerdo con la filosofía política de cierto partido o coalición, pero no milita en ellos, aunque la apoye, colabore, le preste asistencia... Hay militantes y afiliados; este simpatiza; aquel trabaja voluntariamente para su organización, además de pagar una cuota para su sostenimiento, y se presupone que se halla en primera línea de batalla para hacer proselitismo de su ideología; el afiliado, apenas cuenta; en ocasiones, ni la militancia, sólo requerida para que actúe como interventora en las mesas electorales y como plausómetro en los mítines: todo lo decide la cúpula del poder: las listas, los cargos, los asesores... Todo el mundo desea figurar en las listas; los cargos, más que una carga, resultan ser un premio con el que se distingue a los ahijados, familiares o allegados, no tanto por formación, ideología o trabajo como por plus a una lealtad obligada para la supervivencia política, que, además, está muy bien retribuida, muy por encima de la media de quienes debieren ser beneficiarios de la política: los parados, los más necesitados, sobre quienes se cargan impuestos y tasas mil para mantener el ejército de la clase política y sus fieles y no tan abnegados asesores y empleados, que tan solo sueñan con su buen sueldo a final de mes, que es lo único que les importa, como un día me dijere un alto cargo de la Junta de Extremadura.
            Un dirigente político extremeño se refirió en cierta ocasión a los militantes de su partido como "las putas bases" que se pasaba por el arco del triunfo; pero, cuando las necesitaba, bien que las llamaba a apretar las filas. Sigue ocurriendo lo mismo. Tras la caída del exsecretario general del PSOE, Pedro Sánchez, un militante interesado dijo por devoción: "A Pedro le han elegido 62.000 militantes y le han apartado 132" (véase hoy.es, de 09/10/2016); pero olvidaba referirse --como si el Comité Federal no fuere el máximo órgano entre congresos para decidir la política de alianzas por la que aquel derivaba-- a la sangría de militantes que se dieren de baja desde su elección: 1.000 diarios, unos 24.300 en sus dos años en el cargo, muy superada por los 18.900 militantes que se dejó atrás su antecesor, Pérez Rubalcaba (véase ecodiario.eleconomista.es, de 10/11/2016), que devino de la crisis económica y del ocaso de Zapatero en la Presidencia.
            El exsecretario general del PSOE, Pedro Sánchez, reaparece hoy sábado 26 de noviembre en Xirivella y en Sueca (Valencia) en sus primeros actos públicos tras abandonar el escaño para hablar del futuro de la socialdemocracia y para insistir en sus tesis conocidas: una política de alianzas a la izquierda, un partido más abierto a la militancia y con mayor participación de los afiliados en la vida del partido (véase europapress.es, de 25/11/2016). Sánchez siempre apeló a la militancia para salvar el trono que no pudo sostener y el acta de congresista, de la que hubo de dimitir por no abjurar de sus principios. El mismo día de su dimisión como diputado dijo que "defenderá el derecho a votar de toda la militancia para corregir el equivocado rumbo" de la Gestora que preside su partido, y solicitaba ya fecha, lugar y hora para el congreso extraordinario (véase 20minutos.es, de 29/10/2016), con el que amenazaba al Comité y que él aplazó durante casi un año, a sabiendas de que primero estaba la gobernabilidad de España y después, el congreso. ¡Oh, la militancia y  afiliados, tan abandonados por la dirección como recurso para sus propósitos...! En su discurso de despedida como secretario general apeló a la militancia a que decidiera (véase ocadizdigital.es, de 01/10/2016). Ya antes, Sánchez había apelado también a la militancia para que se pronunciara sobre los pactos para formar gobierno, y ganar tiempo (véase foixblog.com, de 30/01/2016); en febrero, la militancia ratificó el acuerdo con Ciudadanos, que avalaba su política de pactos para la investidura (véase elpais.com, de 29/02/2016)... Y así, hasta el Comité Federal del 01/10/2016, en que Pedro Sánchez perdió una votación que pretendió ganar a hurtadillas para convocar un congreso extraordinario, que finalmente perdió por 133 votos contra 107 (véase 20minutos.es, de 02/10/2016), y... fuese a recorrer España en busca de la militancia perdida...

miércoles, 16 de noviembre de 2016

CÁCERES, CAPITAL EUROPEA DE LA ACCESIBILIDAD

 
           La ciudad de Cáceres ha presentado su candidatura para el premio Capital Europea de la Accesibilidad en 2017, premio instituido por la Comisión Europea y que tiene por objeto reconocer a las ciudades con población superior a los 50.000 habitantes que más se hayan distinguido en promover la accesibilidad universal. El gobierno local ha aprobado diversas ordenanzas que se suman al borrador del nuevo Reglamento de Accesibilidad Universal de la Junta de Extremadura. Para mejorar esa accesibilidad, el gobierno local aprobó una Ordenanza de Accesibilidad Universal, puso en marcha las scooter turísticas (escúter, o ciclomotor de ruedas pequeñas) para personas con movilidad reducida; ha instalado bucles magnéticos para personas sordas, que facilitan la accesibilidad auditiva en el entorno; ha creado una aplicación turística con lengua de signos y subtítulos para conocer la ciudad; tiene un servicio de intérpretes de lengua de signos,  además de rutas accesibles e inversiones en rebajes de bordillos y acerados. Ha obtenido Cáceres el premio Reina Sofía de Accesibilidad, el Premio a Ciudad de Turismo Accesible y el Premio ONCE de Accesibilidad. Ha firmado convenios con distintas organizaciones que trabajan con la discapacidad. La accesibilidad está ya en el orden del día de la política urbanística.
            La ciudad moderna es más accesible que el casco histórico, lo más visitado, lo menos conocido. Las personas mayores o con discapacidad que visitan la ciudad se enfrentan a dos problemas: acercarse a él lo más posible en vehículos y sortear calles pinas para entrar por el Arco de la Estrella. El estacionamiento de Galarza ha acercado la visita al casco histórico; pero desde él hasta la plaza Mayor, tiene una calle --Alzapiernas-- que hace honor a su nombre. Es corta la distancia, pero difícil la bajada, peor aún la subida, como la Cuesta de la Compañía en la ciudad antigua.
            El Ayuntamiento de Cáceres prevé instalar unas escaleras mecánicas en la calle Alzapiernas, inapropiadas en la ciudad antigua, para salvar ese escollo de acceso al conjunto patrimonio de la Humanidad. Es una acción, entre otras, que se financiará con los 10 millones de euros del proyecto de estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible e Integrado (DUSI), aprobado por la Comisión Europea, que el ayuntamiento complementará con otros 2,5, para hacer de Cáceres "una ciudad inteligente, sostenible e integradora" de aquí al 2023, según su alcaldesa, Elena Nevado.
            El 3 de diciembre, Día Internacional de las Personas con Discapacidad, se fallará en Bruselas la ciudad ganadora de la Capitalidad Europea, a la que aspiran por España,  junto a Cáceres, Lugo, Santander, Linares, Gijón, Pozuelo de Alarcón y Terrasa. Ojalá Cáceres esté entre las finalistas por los esfuerzos realizados y por las acciones previstas en el DUSI.

domingo, 13 de noviembre de 2016

LEALTAD, DISCIPLINA Y CONCIENCIA EN LOS PARTIDOS POLÍTICOS

 
           Entendemos por lealtad el cumplimiento de lo que exigen las leyes de la fidelidad y las del honor y hombría de bien. Frente a la lealtad, muchos esgrimen la disciplina de voto; pero el artículo 67.2 de la Constitución Española afirma que los miembros de las Cortes no están ligados por mandato imperativo, y el artículo 79.3 señala que "el voto es personal e indelegable"; es decir, que "no hay mandato imperativo para ningún diputado", según expresare la exmagistrada del Tribunal Supremo y candidata socialista al Congreso, Margarita Robles. Sin embargo, el reglamento interno del PSOE, en su artículo 76, discrepa: "Los miembros del Grupo Federal del PSOE asumen y están obligados a acatar la declaración de principios y resoluciones aprobados en el Congreso Federal del partido." Frente a la lealtad a los principios del partido y sus resoluciones, la ausencia del mandato imperativo, se yergue también la libertad de conciencia. El voto en conciencia el día de la investidura de Mariano Rajoy era un "derecho innegable" que hubieren los diputados que votaren "no", en virtud de su reglamento interno, argumento empleado por los díscolos en defensa de su derecho a votar en conciencia, que situaban en él "una concepción ética de la política" (véase gaceta.es/noticias/crisis-psoe, de 07/11/2016). Frente al dilema planteado en las filas socialistas tras un año de bloqueo institucional, el portavoz socialista, Antonio Hernando, proclamó: "Ni abstención mínima ni libertad de voto en conciencia" (véase 20minutos.es, de 26/10/2016).
            La libertad de voto en España es un déficit democrático que no se da en Europa. En los dos partidos mayoritarios en España (PP y PSOE) tenemos ejemplos bastantes de esta dicotomía, que llevó a quince diputados socialistas a votar en conciencia "no", en contra de la resolución aprobada por el Comité Federal. En el PP, el senador del Grupo Popular por León, Juan Morano, dijo que "la disciplina es para el ejército" y votó en contra del recorte de ayudas al carbón para su tierra. El senador fue suspendido cautelarmente de militancia y se le abrió  expediente sancionador. No esperó a su conclusión y dio un portazo a su partido, dándose de baja. La diputada y exalcaldesa de Málaga, Celia Villalobos, es reconocida como la díscola de su partido, al votar a favor de la ley de matrimonio homosexual, que su partido rechazó, o en iniciativas a favor del aborto... y ahí sigue... En la votación de la reforma de la Ley del Divorcio, en la que el PP se abstuvo, rompieron la disciplina de voto cuatro diputados populares. En septiembre de 2011, dos diputados aragoneses rechazaron la moción aprobada por PP, PSOE y CIU en defensa del Corredor Mediterráneo como prioritario. Los diputados extremeños Carlos Floriano y Alejandro Ramírez del Molino (este último, fallecido el pasado 26 de agosto) se abstuvieron. El primero dijo que, "en su caso, había sido un error"...
            En el Partido Socialista, en junio de 2010, el diputado Antonio Gutiérrez se abstuvo en la reforma laboral de Zapatero. En agosto de 2011, el mismo diputado votó en contra de la reforma de la Constitución para garantizar la estabilidad presupuestaria. En febrero de 2013, la diputada Carme Chacón y otros trece diputados del PSC fueron sancionados por no respetar la disciplina de voto en el debate de dos iniciativas de CIU e ICV por el derecho a decidir en Cataluña. La primera no apretó el botón, mientras sus compañeros votaban a favor y los socialistas en contra. Quién no recuerda a los llamados "jueces del PSOE", Baltasar Garzón (Torres, Jaén, 1955) y Ventura Pérez Mariño (Vigo, 1948), números 2 por Madrid y 1 por Lugo, en 1993, quienes rompieron la disciplina de voto en varias ocasiones y renunciaron a su acta de diputado, el primero en 1994 y el segundo al año siguiente.
            Los diputados díscolos del PSOE han justificado su voto negativo por razones de ética o conciencia, incluso dos de ellos, pertenecientes a la dirección anterior, justificaron su abstención por "imperativo, abstención", sin valor jurídico alguno. Otros, en cambio, adujeron la disciplina de voto en su decisión de virar del "no" a la abstención, aunque fueren considerados traidores a su jefe, Pedro Sánchez, como su portavoz, Antonio Hernando, y el secretario de Organización, César Luena. El primero traspasó su discurso del "no es no" a la abstención con estas palabras: "No podemos ni queremos permitir que los serios problemas que padecen los ciudadanos estén bloqueados por el puro egoísmo" (elmundo.es, de 27/10/2016). El segundo, mano derecha de Sánchez, afirmó que cumplirían con la disciplina de voto si su partido decidía la abstención. Y así fue. Y al secretario general, obligado a dimitir por el Comité Federal, no le quedó otra opción, por conciencia, que marcharse también como diputado, como había predicho Ibarra, quien había anunciado que "tendrá la decencia de marcharse si vota en contra" (véase noticiascuatro. com,  de 28/10/2016).
            Qué decir, en cambio, de los diputados extremeños: a Pilar Lucio, número 1 por Cáceres, y secretaria del Cambio Climático y de la Sostenibilidad en la ejecutiva de Sánchez,  le asaltó la duda cartesiana: primero dijo que se debía a Sánchez y después acató lo que dijo el Comité Federal. El 1 de octubre solo le faltó llorar. No, señoría: usted se debía primero a su secretario regional, quien fue el que la hizo consejera y quien la puso de número 1 al Congreso, y después, al secretario federal, por muy cerca que estuviere de él; y, sobre todo, al Comité Federal. Esa duda ya le vale su postergación en la próxima lista. No vale usted para la política, por mucho que se lo crea. Ya se lo dijo Monago en su discurso de investidura al calificarla como "consejera de desigualdad y desempleo". Y, encima, usted sonreía... No están las cosas para sonreír. Usted ha dudado entre su sillón y su supervivencia y al final se inclinó por ella; pero ya es tarde. Sin embargo, su compañero, César Ramos, fue más cuco: a pesar de reconocer su cercanía a Pedro Sánchez, apostó por la lealtad a ambos secretarios, al regional y al federal. Y por Badajoz, Marisol Pérez, al igual que su compañero José Ignacio Sánchez Amor, se decantaron por la abstención. Y "abstenerse no es apoyar al PP bajo ningún concepto" (véase Fernández Vara, en politica.elpais.com, de 30/08/2016). Ahora toca pactar, lo que no hicieron en un año, pero lo cobraron de todos.
 

miércoles, 9 de noviembre de 2016

UNA COMIDA DE LA ROMA IMPERIAL EN MÉRIDA A FINALES DEL XX

 
            Carmen Gasset Loring, que fuera presidenta de la Asociación de Estudios Romanos y de la Asociación de Amigos del Museo Nacional de Arte Romano de Mérida, era una amante de la arqueología y de todo lo que concerniere al mundo romano. Su temprana muerte, acaecida en 2006, privó a Mérida de una de las mejores embajadoras de su arqueología y de todo lo que afectare a la vida durante la época imperial. Su colega Desiderio Vaquerizo, en la laudatio que hiciere tras su muerte, justificaba sus vínculos con Extremadura con los lazos familiares que la unían a la Comunidad, entre los que citaba al conde de Campomanes, que ya se ocupare y preocupare por estos temas desde tiempos del rey Carlos III [1].
            Unos años antes de su muerte, Carmen Gasset organizó en la capilla del Parador del Turismo de Mérida una comida de la Roma Imperial. Hubiere degustado en ese lugar comidas y cenas varias por motivos profesionales, pero con menús de esta época y no de la romana. Asistía, entre otros, a aquella comida, el catedrático y banquero  José Ángel Sánchez de Asiaín (Baracaldo, 1929), en su calidad de miembro del Patronato de la Fundación de Estudios Romanos (1996-2010) y que fuere Genio Protector de la Colonia Augusta Emerita (2007).
            No fuere bastante el menú impreso que se nos facilitare, por lo que Carmen Gasset nos hizo una introducción al que íbamos a degustar, sino que, entre plato y plato, se levantaba de su mesa y nos informaba de lo que fuéremos a comer, de su composición y elaboración. No en vano, es autora de un libro que recoge los manjares de dioses de la época imperial. [2] Quizá fuere suficiente su obra para conocer la cocina en la época del Imperio; pero su sabiduría y amor por las cosas del mundo romano nos transportaban, más que el propio menú en sí, a una época en la que quizá no necesitáremos haber leído el tratado de Apicio [3]  ni conocer las fuentes documentales necesarias para las lecturas complementarias sobre la cocina romana, de Plinio el Viejo; Marcial, Juvenal, Suetonio, Petronio, Horacio, Virgilio, Plauto, Ovidio, Terencio o Plutarco. Sus explicaciones constituían, como en la obra de Revel, J. F., un festín en palabras.[4] ¡Cuánto sabía Carmen del mundo romano, cómo lo vivía y lo transmitía...!
            En un ensayo para estudio de bachilleres, la profesora María Luisa Guevara Galván [5], tras advertir que el conocimiento de la cocina romana antigua (productos, recetas, métodos de conservación y elaboración) se basa en el indicio de todos los elementos antiguos que nos ha legado la antigüedad, se refiere a las tres comidas que los romanos realizaban diariamente:
            Ientaculum, equivalente a nuestro desayuno (de 7:00 a 8:00), basado en queso, leche y pan untado con aceite, ajo y sal, o remojado en vino. A veces se tomaba miel, queso, higos, huevos, fruta fresca o seca, uva, dátiles, olivas adobadas... Al desarrollarse la pastelería, se desayunaba unos bizcochos con vino de pasas, que los niños se llevaban a la escuela.         
            Prandium, tentempié que se tomaba a mediodía, compuesto de pan, carne fría, verduras, pescados, huevos y frutas. Se comía de pie, frío y muy rápido.
            Frente a estas dos comidas tan ligeras y poco alimenticias, la Cena (a la hora octava o nona del día: 14:00 o 15:00 hrs.) tras el baño, era muy simple hasta el siglo II a. C., puesto que se tomaba el puls o pulmentum, especie de papilla de harina de trigo, junto a otros alimentos del campo. El profesor Jérôme Carcopino [6] afirma, sin embargo,  que "la única comida digna de entenderse como tal era para todos la de la noche: la cena".
            Un banquete romano.-Un banquete solía comenzar al término de la hora octava (de 12:44 a 13:29) en invierno y de la nona (14:31 a 15:46) en verano. Sobre esa hora comeríamos a finales del siglo XX en la Mérida actual. Una cena romana constaba, al menos, de siete platos, distribuidos en tres partes: Gustatio o entremeses, el primer plato se componía de verduras, ensaladas, aceitunas, pescados en salmuera, ostras, champiñones y huevos, acompañados por un vino caliente llamado mulsum (vino tinto con miel). El objetivo de la gustatio era estimular el apetito. Se acostumbraba a presentar tres entradas. Después, la prima mensa, era el plato fuerte de la cena. Lo comprendían aves (tordos, perdices, lirones, tórtolas, pollos...), carnes (cordero, jabalí...) y pescados (salmonetes, anguilas, lenguados...) Por lo general, se servían dos o tres platos. En la secunda mensa o postre se servían frutas frescas, dulces o frutos secos.
            Al igual que al comienzo, tenía lugar una nueva libación en honor a los dioses, acompañada de un brindis de carácter patriótico o religioso, indicativo de que la velada había llegado a su fin.
            Bebidas.-Un apartado importante del banquete romano eran las bebidas, entre las que hay que destacar: hidromiel: mezclar un vaso de miel y dos vasos de agua mineral, revolver la mezcla para disolver la miel en el agua. Receta para convertir en blanco el vino tinto: echar en la botella arina de haba, o bien la clara de tres huevos, y agitar durante bastante tiempo y, al día siguiente, el vino será blanco. Vino de dátiles o higos: machar dátiles o higos, mezclar con agua, se deja macerar dos días y se obtiene un vino semejante al vino con miel o mulsum, y solo se conserva durante diez días. Vino de rosas: quitar la parte blanca de la extremidad de los pétalos, enfilad estos en rosario, ponedlos a macerar siete días en el vino y después, sacar las rosas como hicisteis con las anteriores. Antes de beberlo, añadirle miel, procurando emplear las rosas de mejor calidad, que no estén humedecidas por el rocío.
 

[1]  Vid.:  Vaquerizo Gil, Desiderio:  studylib.es, Grupo de Investigación HUM-236.
 
[2] Vid.: Gasset Loring, Carmen: El arte de comer en Roma: alimentos de hombres, manjares de dioses, Fundación de Estudios Romanos, 2004, 39 págs.
 
[3] Vid.: Apicio: La cocina en la antigua Roma, Edic. Generales, Anaya, 1985.
 
[4] Vid.: Revel, J. F.: Un festín en palabras, Barcelona, Edit. Tusquets, 1980.
 
[5] Vid.: De Guevara Galván, María Luisa:  Un viaje culinario a la antigua Roma, en http://latinygriego.webcindario.com/derecoquinaria_cas. pdf, Colegio de Ciencias y Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), 22 págs.
 
[6] Vid.: Carcopino, Jérôme:  La vida cotidiana en Roma en el apogeo del Imperio, Temas de hoy, Colección Historia, Madrid, 1989-2001, pág., 331.
 

domingo, 6 de noviembre de 2016

ZOIDO, EL HIJO DEL PASTELERO DE FREGENAL DE LA SIERRA

 
           Hubiere iniciado la redacción de mi artículo "Ministros extremeños en la etapa democrática" (véase radiointerior.blogspot.com, de 05/11/2016) días antes cuando, he aquí, que, ya publicado, comienzo a leer biografías y anecdotarios del nuevo ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido Álvarez (Montellano, Sevilla, 21/01/1957). Más aún me sorprendo cuando veo el titular "El frexnense Juan Ignacio Zoido, nuevo ministro del Interior" (tentudíadirecto.com, de 06/11/2016) en el digital del pueblo de sus ascendientes. Le había perdido la pista desde que dejare de ser alcalde de Sevilla en 2015; pero sí recuerdo que hablé de él con el exsubdelegado del Gobierno en Cáceres, José Diego Santos, durante un acto oficial de la Asociación de Periodistas, y me admitió que le conocía.
            Al leer los nombres del nuevo Gobierno de Rajoy, bien supiere de quién se tratare; pero nada de sus ascendientes familiares en Fregenal, ya en el olvido. Quedaba, pues, coja la síntesis que hubiere pespunteado de los ministros extremeños de la etapa democrática. Y a cada uno, lo suyo. Si hemos tenido ministros consortes con extremeñas, o nacidos en Extremadura y Cataluña, pero afincados en esta Comunidad o en Madrid, no tendría por qué ser menos el hijo del pastelero de Fregenal de la Sierra. "Criado en Extremadura, el nexo lo tuvo en Andalucía" (elperiodico.com, de 03/11/2016).
            Zoido, aunque nacido en Montellano (Sevilla), de madre almeriense, Catalina Álvarez, maestra,  decidió tener a sus dos primeros hijos en su localidad natal. porque su tío era médico allí. Su padre, Florentino Zoido Risco, era natural de Fregenal. Juan Ignacio Zoido es el mayor de cinco hermanos. Su padre, fallecido prematuramente, regentaba un obrador --Hijos de Manuel Risco--, con más de un siglo de elaboración artesana, fundada por el bisabuelo Zoido Álvarez, proveedor real de Alfonso XIII desde 1879 (lavozdegalicia.es, de 04/11/2016), que aún lleva su hermano, José María, mientras que Florentino, su otro hermano, regenta una farmacia (véase hoy.es, de 16/10/2011). Casado con Beatriz Muñoz, maestra almeriense, tiene tres hijos: Juan Ignacio (27), Beatriz (19) y Fernando (3). Otro hijo, José María, falleció a los 17 años en accidente de circulación.
            El nuevo ministro del Interior de España es juez de profesión y político de vocación. Su trayectoria profesional la inicia en 1983 como juez de ascenso en Arrecife de Lanzarote (Las Palmas). En 1984 es promovido a juez de ascenso y destinado al juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Utrera (Sevilla). En 1987 es ascendido a magistrado, iniciando su nueva etapa en el Juzgado número 3 de La Laguna (Tenerife).
En 1987 regresa a Andalucía por concurso de traslado, y es destinado al número 7 de Sevilla (Familia). En 1989, al crearse los juzgados de lo Penal, pasó a ocuparse del Juzgado número 7. En 1992 fue nombrado juez decano de Sevilla y miembro de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior de Andalucía; y en 1996, director general de Relaciones con la Administración de Justicia.
            Como político, inició su carrera como concejal en Sevilla (2007-2016); diputado del Parlamento de Andalucía (2008-2014); diputado en Cortes desde el 16 de enero de este año; presidente del PP de Andalucía (2012-2014); alcalde de Sevilla (2011-2015) y ministro del Interior desde el pasado día 4.
            El periodista sevillano Carlos Navarro Antolín publicó en 2010 un libro biográfico, titulado "Zoido. Destino Sevilla" (Jirones de Azul, 2010; segunda edición 2014), prologado por Carlos Herrera,  en el que narra la vida de un muchacho de pueblo llamado a heredar el negocio familiar de elaboración artesana de dulces y que acabó estudiando en la Universidad por deseo de su madre.
            Zoido fue conocido como juez por su sentencia en el juicio de separación de los duques de Feria, Rafael Medina y Fernández de Córdoba y Naty Abascal; en 2013 ofició la boda civil del torero Francisco Rivera y Lourdes Montes (elmundo.es, de 05/11/2016). Como alcalde de Sevilla, retiró en 2012 la calle dedicada a la actriz Pilar Bardem para dedicársela a Nuestra Señora de las Mercedes, a propuesta de la Hermandad de Santa Genoveva (publico.es, de 28/01/2012).
 

sábado, 5 de noviembre de 2016

MINISTROS EXTREMEÑOS EN LA ETAPA DEMOCRÁTICA

 
           El nuevo gobierno de Mariano Rajoy en su segunda legislatura como presidente no cuenta, en clave extremeña, con ningún ministro en su gabinete. No es ninguna novedad que Extremadura no sume hoy, como lo hizo durante los siglos XVI al XIX, en las esferas del poder político, como no computare nunca desde entonces en la gobernabilidad de España, porque Extremadura no tenía poder por sí misma, más que el de los caciques, dueños de vidas y haciendas, que compraban los votos para ser diputados en la capital del Reino.
            El Generalísimo Franco (Ferrol, 1892; Madrid, 1975), jefe del Gobierno desde el 28/09/1936 y autoproclamado jefe del Estado en la misma fecha y Caudillo de España desde el 01/10/1936, apenas tuvo dos: Adolfo Díaz-Ambrona Moreno (Badajoz, 1908; Madrid, 1971), ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación (1965-1969) y José María Martínez Sánchez-Arjona  (Navalmoral de la Mata, 1905; Madrid, 1977), ministro de la Vivienda (1960-1969).
            Desde la transición, tan solo cuatro ministros nacidos, o vinculados a Extremadura y uno consorte han ocupado carteras en los gobiernos democráticos desde la primera presidencia de Adolfo Suárez (1976-1981):
            Alberto Oliart Saussol (Mérida, 1928), abogado del Estado, fue tres veces ministro con Suárez: ministro de Industria y Energía (1977-1978), ministro de Sanidad (1980-1981) y ministro de Defensa (1981-1982). Medalla de Extremadura en 1988 y presidente de RTVE en la etapa de Rodríguez Zapatero, de 2009 a 2011, por acuerdo entre el PSOE y el PP.
            Enrique Sánchez de León (Campillo de Llerena, Badajoz, 1934), licenciado en Derecho, inspector de Trabajo. Procurador del Estado en 1971. En el primer gobierno de la Monarquía, fue director general de Ordenación de la Seguridad Social y, posteriormente, director general de Política Interior. Fundó Acción Regional Extremeña (AREX), integrada después en UCD. Diputado por Badajoz en las elecciones de 1977 y 1979. Ministro de Sanidad en el primer gobierno de Suárez entre el 04/07/1977-05/04/1979. Tras disolverse UCD, se integró en el CDS.
            Juan Antonio Ortega y Díaz-Ambrona (Madrid, 1939). De ascendencia extremeña, es licenciado en Derecho y Filosofía y Letras. Letrado del Consejo de Estado. Subsecretario de Justicia (1977-1979), fue ministro de Educación, Universidades e Investigación (1980-1981), con Suárez y Calvo Sotelo,  y secretario general de UCD (1982-1983). Vivió la posguerra, la dictadura, la transición y la democracia, memorias que recogió en su libro "Memorial de transiciones" (1939-1978).
            Juan Rovira Tarazona (Lérida, 1930-1990). Extremeño consorte. Licenciado en Económicas y Derecho por la Universidad de Madrid. Abogado del Estado. Fundador del partido Acción Regional Extremeña, integrado en UCD. Diputado en Cortes desde 1977 a 1982. Integrado en Alianza Popular, fue diputado por Alicante en la III Legislatura. Tras aprobarse la Constitución en 1978, fue ministro de Sanidad y Seguridad Social entre abril de 1979 y septiembre de 1980, cargo en el que le había precedido Enrique Sánchez de León y le sucedió Alberto Oliart.
            María Antonia Trujillo (Peraleda del Zaucejo, Badajoz, 1960). Licenciada en Derecho por la Universidad de Extremadura en 1985 y doctora en 1991, con premio extraordinario. Profesora titular de Derecho Constitucional desde 1993. Diputada en la Asamblea de Extremadura (2003-2004). Diputada en Cortes (2008-2011). Consejera de Presidencia de la Junta de Extremadura (2000-2003) y consejera de Fomento (2003-2004). Fue ministra de Vivienda y Urbanismo de España (2004-2007) en el primer gobierno de Zapatero.
            Ministro extremeño en el exilio
            Celestino Corbacho Chaves (Valverde de Leganés, Badajoz, 1949), afincado en Cataluña desde la infancia. Concejal en Hospitalet de Llobregat (1983-2008), diputado del Parlamento de Cataluña (desde noviembre de 2010), alcalde de Hospitalet (1994-2008), presidente de la Diputación de Barcelona (2004-2008) y ministro de Trabajo e Inmigración de España (2008-2010) con Zapatero.
            Figuras extremeñas de la transición
            Hay otras figuras extremeñas importantes en la transición española, aunque no fueren ministros del Gobierno. Entre ellas, cabe destacar al presidente de las Cortes Constituyentes de 1978, Antonio Hernández Gil (Puebla de Alcocer, Badajoz, 1915; Madrid, 1994). Licenciado en Derecho por Salamanca y doctor en Madrid en 1934 con premio extraordinario.  Catedrático en Granada, ejerció la docencia en esa ciudad hasta 1954, en que se trasladó a Madrid. Fue presidente del Consejo General del Poder Judicial y presidente del Tribunal Supremo (1985-1990); presidente del Consejo de Estado (1982-1985). En 1977, el rey Juan Carlos le nombró senador y presidente de las Cortes y del Consejo del Reino (1977-1978) hasta la promulgación de la Carta Magna por el monarca el 29 de diciembre de este último año. En 1975 fue presidente de la Academia de Jurisprudencia y Legislación. Director de la Real Academia de Extremadura (1983-1991) y Medalla de Extremadura en 1986.
            Otra figura destacada de la transición fue Francisco Rubio Llorente (Berlanga, Badajoz, 1930; Madrid, 2016).  Cursó Derecho en las Universidades de Sevilla y Madrid (1948-1953); en 1964 obtuvo el título de doctor con premio extraordinario. Ingresó por oposición en el Cuerpo Técnico de la Administración Civil y en el de letrado de las Cortes. Profesor en la Facultad de Derecho de la Universidad Central de Venezuela (1959-1967) y en las Facultades de Ciencias Políticas y de Derecho de la Universidad Complutense hasta su jubilación. Secretario general del Congreso de los Diputados y asesor de la ponencia que redactó la Constitución (1977-1979); director del Centro de Estudios Constitucionales (1979-1980); magistrado del Tribunal Constitucional (1980-1989) y vicepresidente desde esta última fecha hasta 1992. Presidente del Consejo de Estado (2004-2012). Medalla de Extremadura 2008.
            Antonio Hernández Mancha (Guareña, 1951), abogado del Estado, fue otro extremeño con presencia en la transición. Diputado del Parlamento de Andalucía por Córdoba (1982-1987) y presidente del PP de Andalucía (1980-1987), senador en las Cortes Generales (1986-1989) y presidente de Alianza Popular (1987-1989).
            De esta época, aunque no político de profesión, es el filántropo, intelectual y hombre de negocios, con raíces en Los Santos de Maimona, Diego Hidalgo Schnur (Madrid, 1942). Su padre, Diego Hidalgo Durán, ministro de la Guerra durante la II República, nació en esta localidad. Doctor en Ciencias Políticas por la City University de Nueva York y licenciado en Derecho por la Complutense, fue jefe de División del Banco Mundial (1968-1977). Creador de varias Fundaciones, entre ellas la Fundación Maimona, del pueblo del que es hijo adoptivo. En Extremadura es comisario general de Marca Extremadura, miembro del comité ejecutivo de la Corporación Empresarial y fue presidente del Consejo Social de la Uex.